Caretas Lab | Mucho ojo

Hay 20 mil nuevos ciegos al año en el Perú a pesar de que ya no hay razón para el deterioro de la salud ocular.
Trasplante de córnea artificial, que no es rechazada por los organismos.

OftalmoSalud comenzó su trabajo hace 30 años por iniciativa del oftalmólogo Luis Izquierdo Vásquez, catedrático y exrector de la Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Hoy la institución atiende a unos 16 mil pacientes por mes y cuenta con cinco clínicas en el país. Luis Izquierdo Villavicencio, hijo del fundador y también oftalmólogo, cuenta que la institución ofrece campañas gratuitas para población de bajos recursos en el hospital que lleva el nombre de su padre en Juanjuí. 

Una particularidad es su departamento de docencia e investigación, que cuenta con convenios con las universidades de San Marcos, Ricardo Palma y Federico Villareal. “Nos permite entrenar, enseñar y compartir docencia con residentes de oftalmología”. Se trata del ya graduado que entra a trabajar en la especialidad por tres años. Hoy tienen 24 residentes, cuatro de ellos peruanos. Vienen de Suiza, Alemania, Israel, países asiáticos e incluso Etiopía. Ingresan aproximadamente 7 por año.

“Tenemos un comité permanente de investigación que produce publicaciones científicas anuales, publicadas en revistas de alto impacto”, añade Izquierdo Jr., quien sostiene que los principales problemas de salud ocular en el Perú empiezan por la ceguera prevenible, en este caso la catarata”. Cada año en promedio hay entre 18 mil y 20 mil nuevos ciegos en el país. Un problema que no es cubierto ni sumando al Ministerio de Salud, la Seguridad Social y los servicios privados.

Luis Izquierdo Villavicencio de Oftalmosalud, donde se atienden 16 mil pacientes al mes.

“Un paciente con cataratas, sin importar su edad, puede volver a ver nuevamente mediante una cirugía usualmente ambulatoria”, dice Izquierdo. “Y esto tiene un impacto social tremendo”. Es una operación de cinco a diez minutos donde se reemplaza el cristalino con un lente intraocular que permite recuperar la visión. La anestesia ya no es con una inyección, sino con gotas. “El paciente sale de la sala de operaciones sin puntos y sin parche”.

La segunda deficiencia más marcada en el país, aunque parezca mentira, es el deterioro de la capacidad visual por la falta de lentes, usualmente relacionada con bajos recursos, que puede llegar hasta la ceguera.

El glaucoma, una enfermedad muy recurrente por el aumento de la presión en el ojo, es otra causa relevante de ceguera. “Le decimos el ladrón silencioso, porque muchas veces el paciente lo nota pero no cree que es grave”. Otras enfermedades crónicas como la hipertensión arterial y la diabetes también producen lesiones en los ojos.

“A la oftalmología la conocemos como la ventana del cuerpo humano porque desde ahí puede verse internamente. Enfermedades múltiples, sistémicas, todas se reflejan en el ojo”.

Un signo de los tiempos es el incremento del llamado “ojo seco”, por el tiempo que pasamos frente a la pantalla con la consecuente reducción del parpadeo. “Comienza a evaporarse la lágrima del ojo y eso provoca el ojo seco que tiene como consecuencia la visión borrosa. Un tip es que si trabaja frente a la pantalla se acostumbre cada cierto tiempo, unos 20 minutos, a cerrar los ojos por 20 segundos. Para acordarse le decimos el 20-20. Este simple hecho ayuda muchísimo”.

La operación más frecuente relacionada con la salud ocular es la de láser para la eliminación de anteojos. Los avances tecnológicos permiten ahora corregir el astigmatismo, la miopía y la presbicia. “La gente no lo puede creer pero la operación toma un minuto”, exclama el especialista, que señala que OftalmoSalud cuenta con el mejor láser de Sudamérica. “Un paciente de 70 años puede leer sin anteojos a diferencia de su hijo de 45”.

En un futuro cercano, aventura, usar anteojos será considerado prácticamente una deficiencia pues casi no habrá motivo para someterse a una intevención tan rápida, segura y sencilla. 

Del mismo modo, el doctor Izquierdo anticipa que las enfermedades prevenibles -diabetes, hipertensión- atacarán menos agresivamente al ojo por la tecnología y nuevos medicamentos desarrollados.

OftalmoSalud es la única institución en el Perú que realiza transplantes de córnea artificial, que no es rechazada por los organismos de los pacientes que sí pueden haber tenido problemas con los tejidos humanos. Además, frente a la pobre cultura de donación de órganos que persiste en el país, “recibimos mediante un convenio corneas de los bancos de ojos en Estados Unidos, lo que nos permite programar los trasplantes en una o dos semanas, a diferencia de los 5 o 7 años que toma en otras entidades”. Cuentan también con un programa para ayudar en este caso a los pacientes con menores recursos. Y no falta mucho para que, en el Perú, de una sola córnea donada se pueda hacer un cultivo de células y sacar otras 40 córneas.  

“En el futuro se realizarán procedimientos que no se realizaban antes y permitir ver a esos pacientes sobre los que decíamos que ya no había nada que hacer”. Para los ojos, el cielo es el límite.