La minería comienza con la exploración. Y en el Perú, esta afirmación cobra un peso particular, no solo por la riqueza geológica del país, sino por su posición en el mapa global de los recursos estratégicos. Con esa premisa, proEXPLO 2025, el mayor congreso de exploración minera de América Latina, se prepara para su decimocuarta edición del 5 al 7 de mayo en el Centro de Convenciones de Lima.
“El Perú es un país bendecido por una geología extraordinaria, pero sigue siendo un territorio subexplorado. Ese potencial es una oportunidad que debemos saber aprovechar”, señala Walter Tejada. Bajo su liderazgo, la nueva edición de proEXPLO buscará posicionar nuevamente al país como un referente mundial en minería moderna, responsable e inclusiva.

En cifras, proEXPLO 2025 reunirá a más de 2000 asistentes de al menos 30 países, y ofrecerá más de 70 charlas técnicas y conferencias magistrales, además de paneles de discusión, sesiones interactivas y seis cursos especializados, organizados antes y después del evento principal. En paralelo, se desarrollarán visitas a operaciones mineras en la costa sur y en Andahuaylas-Yauri, que permitirán recorrer el ciclo completo: desde la prospección hasta la explotación.
“La exploración es la piedra angular del ciclo minero. Sin exploración no hay proyectos, y sin proyectos no hay desarrollo. Por eso proEXPLO es estratégico para el país”, apunta Tejada.
Uno de los puntos centrales de esta edición será el impulso a la participación de jóvenes profesionales y el acercamiento con la academia. “Yo asistí al primer proEXPLO en 1999 como joven geólogo, y me marcó. Hoy queremos que las nuevas generaciones vivan esa misma experiencia y accedan a conferencias con los mejores expertos del mundo”, afirma con entusiasmo.
El evento también abordará de forma transversal temas clave como inclusión y diversidad, gobernanza ESG, y el rol de las empresas juniors, que en Perú representan apenas el 23 % de la actividad exploratoria, frente al promedio mundial de casi el 50 %. “Eso responde a los plazos excesivos para sacar adelante proyectos. En el Perú, pueden pasar hasta cuatro años desde que nace el interés por explorar hasta colocar el primer taladro. En otras jurisdicciones, eso toma un año. Debemos cerrar esa brecha sin bajar estándares ambientales, solo simplificando procesos y haciendo más predecibles los tiempos”, señala.
proEXPLO 2025 también pondrá énfasis en la tecnología aplicada, con énfasis en inteligencia artificial, machine learning y nuevas técnicas geofísicas, así como en el rol de la mujer en la exploración, que apenas alcanza un 12 % de participación. “Hay empresas que ya han logrado paridad de género. Sabemos que se puede, pero requiere esfuerzo sostenido y políticas activas para atraer y retener talento femenino”, agrega.
En un momento en que el mundo busca duplicar su producción de cobre en los próximos 25 años, el mensaje de Tejada es claro: “El Perú tiene lo que el mundo necesita. Pero necesitamos visión, reglas claras e inversión en conocimiento para poner en valor nuestros recursos con responsabilidad y ambición”.