Al defensor del Pueblo Josué Gutiérrez no le bastó con reducir los requisitos para Elizabeth Zea, miembro del equipo técnico de Fuerza Popular, asuma la Adjuntía en Derecho Constitucional. Ahora quiere designar a dedo a los nueve adjuntos de la institución.
Ese es el tenor del proyecto de ley que presentó al Congreso que lo designó. Pero no es lo único que quiere controlar el ex abogado de Vladimir Cerrón, pues también quiere designar, a sola firma, a los jefes de las Oficinas Defensoriales que busca abrir en todo el país y al secretario técnico de la comisión que elegirá a los nuevos miembros de la Junta Nacional de Justicia.
Al volverlos funcionarios de confianza, Gutiérrez no solo tendrá el poder de designarlos, sino de removerlos, lo que pone en riesgo la independencia de estos funcionarios, que en la práctica, estarían sujetos a la voluntad de su jefe.
Otra de las aspiraciones del defensor, es la de quedarse en el cargo hasta que el Congreso designe a su sucesor. Anteriormente, había opinado que la institución estaba “acéfala” cuando el primer adjunto ejercía las funciones de defensor interino, a pesar de que el Tribunal Constitucional había determinado que en estos casos, es el adjunto quien debe hacerse cargo con todas las atribuciones de ley.
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Magali González, secretaria general del Sindicato de Trabajadores de la DP, señaló a CARETAS que el cuestionable proyecto no fue consultado con ellos, pese a que pidieron acceso al texto. Tampoco los han recibido, pese a que el flamante defensor al reunirse con el grupo de extrema derecha “Los Combatientes”, que estaba obligado a recibir a todos. Al parecer esto no aplica puertas adentro.
Para la dirigenta existe la preocupación por la desnaturalización del periodo establecido en la ley para ejercer el cargo de defensor del pueblo y por el retroceso de la meritocracia y la transparencia en la elección de los adjuntos, quienes hasta hoy son nombrados por concurso público. Estos funcionarios asesoran al defensor en temas especializados y por eso, se necesita que los más capaces accedan a estos puestos. El concurso además, garantiza su independencia.
La situación es tal, que no solo está renunciando el personal de carrera de la institución, sino que trabajadores nombrados por el mismo Josué Gutiérrez, han decidido abandonar sus puestos.
El Sindicato de Trabajadores de la DP ve con preocupación como su institución se está debilitando y cómo esto puede repercutir en el servicio que brindan. Evalúan medidas a tomar en caso de que la amenaza sobre la entidad avance.
