El ministro de Trabajo y Promoción del Empleo, Daniel Maurate Romero, hizo especial incidencia en atender prioritariamente las causas del problema migratorio y no enfocar las políticas públicas exclusivamente a las consecuencias generadas por este fenómeno. “Por cada 1500 jóvenes que evitamos que se vayan a prisión dándoles oportunidades de empleo, vamos a evitar construir un penal que cuesta 200 millones su mantenimiento”, señaló.
En ese sentido, afirmó que es necesario impulsar el desarrollo de la actividad productiva de las empresas para la generación de puestos de trabajo formales que garanticen el pleno respeto de los derechos laborales. “No es posible ampliar espacios laborales ni beneficios laborales sin unidades productivas. Si se mueren los espacios de empleo, se mueren los derechos laborales”, enfatizó.
Estas declaraciones las ofreció durante su participación en el acto inaugural del «Encuentro tripartito sobre migración laboral y movilidad humana en América del Sur», actividad organizada por la Oficina Regional de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) para América Latina y el Caribe en Lima, con el objetivo de realizar un análisis del fenómeno migratorio en la región y generar líneas de acción para enfrentar esa problemática.
