Lorena Larriviere es a la fecha toda una autoridad de la moda en Perú. Como modelo ha recorrido las principales pasarelas del mundo y, como es sabido, lleva poco más de un año al frente de la prestigiosa Model Lab. Todo un reto en el que plasmará su experiencia en la formación de chicas que quieran desarrollar una trayectoria en el modelaje.
Sin embargo, en contra de lo que se suele pensar del mundo de la moda, para muchos uno de ensueño y felicidad permanente, que tantas leyendas ha tejido alrededor de sus protagonistas, el cual proyecta en el público una idea no del todo justa con la realidad, Lorena señala lo siguiente:
“Lo más difícil de afrontar en esta industria como tal, son los comentarios sobre tu físico. ´Tu cuerpo no me gusta, eres muy alta, eres muy flaca, te faltan caderas…´. Yo tengo 15 años siendo modelo y nunca he parado de trabajar. Esta clase de impresiones es muy común escucharla en este circuito y lamentablemente tiene un efecto negativo en las modelos. Hay muchas chicas que abandonan el modelaje por esta clase de comentarios, porque no tienen suficiente fuerza interior; sin duda, yo he tenido que afrontar situaciones así, pero no he dejado que me afecte porque sé lo que puedo dar”.
Entonces, en dónde Lorena encontró la fortaleza que la ayudó a superar estos embates emocionales. Al respecto, la top model no entra en ambages:
“En mi familia siempre me enseñaron a estar segura de mí misma. Estoy muy agradecida por ello. La base del amor propio hace que sigas adelante y eso es lo que busco en Model Lab: formar chicas seguras y que se desarrollen interiormente. En la fuerza interior está la clave para conseguir los objeticos que nos propongamos. Yo he visto chicas y chicos lindos, pero inseguros”.
Atención a sus palabras, que tienen legitimidad:
“La belleza no garantiza nada, es insuficiente, si no sientes amor propio. Si tienes seguridad, estás preparado para la vida”.
Lorena es.
