Este jueves 26 de octubre, se lanzó en simultáneo en Hispanoamérica, Le dedico mi silencio (Alfaguara), la última novela de Mario Vargas Llosa. Este es un proyecto que tiene a la música criolla como base argumental y se encuentra ambientada en Perú, a inicios de los peligrosos años 90. En CARETAS indicamos que esta novela, más El héroe discreto de 2013 y Cinco esquinas de 2016, forman una trilogía novelística del Perú contemporáneo.
Pero lo que suscita especulación sobre Le dedico mi silencio, es la nota final, en donde el Nobel anuncia su retiro de la ficción y que su próximo ensayo sobre Jean Paul Sartre —filósofo influyente durante su juventud— será lo último que escribirá. Así lo precisó el escritor español Juan Cruz —amigo y editor de algunos libros de MVLL— en el diario Clarin de Argentina, este 22/10.
Más de una vez, MVLL ha incidido en que no dejará de escribir. Y para no dejar de escribir, se ha preparado toda su vida. Salir a correr y caminar en las mañanas no obedecía a la vanidad, su distanciamiento de las bebidas espirituosas no era gratuito, su vigilancia de alimentos tampoco. Escribir desgata físicamente y proyectos literarios como el suyo exigen estar en buena forma física (quien lo dude, pues una leída a De qué hablo cuando hablo de escribir de Haruki Murakami, recurrente candidato al Nobel de Literatura, por cierto). Novelas que bordean o pasan las 500 páginas, a razón de una cada tres años, no solo provienen del talento, que no sirve sin una vida disciplinada. Así lo asumió MVLl desde joven, cuando decidió dejar de fumar y no tomar ni una gota más de alcohol (nunca tuvo fama de bebedor).
El pasado mes de julio, el escritor estuvo internado, por segunda vez, a causa de la Covid-19. Tras superar el primer contagio, en 04/2022, no dejó de trabajar, pero hoy sus actividades han disminuido. No olvidemos que tiene 87 años. Ya quedó en la Historia. Sin embargo, sus últimas novelas han dejado ver un mayor protagonismo del ensayo, género del que sabe, como pocos, de sus grandes ventajas expresivas. Italo Calvino y Frank Kermode ya lo indicaron: la versatilidad del ensayo se posiciona como el registro literario del siglo XXI. Ergo: no hay que poner punto final al anuncio del retiro.
De momento, MVLL vendrá a Perú. Irá a Arequipa y pasará la Navidad en Lima. A seguir leyéndolo.
(GRO).
