Por Dirk Friczewsky – ActivTrades.| Análisis del 10 de julio de 2025
Un par atrapado en el limbo
El tipo de cambio entre el dólar estadounidense y el yen japonés lleva meses atrapado en un rango lateral, fluctuando entre 140 y 150. Esta aparente calma esconde dos tensiones subyacentes que mantienen al par en compás de espera: por un lado, la creciente fricción entre la Casa Blanca y la Reserva Federal; por el otro, la falta de acuerdo comercial entre Japón y Estados Unidos.
Desde el inicio del nuevo mandato de Donald Trump, el debate sobre las tasas de interés en EE.UU. se ha convertido en un enfrentamiento personal entre el presidente y Jerome Powell, titular de la Fed. Trump no ha dudado en insultarlo públicamente, erosionando así la credibilidad institucional de ambos cargos.
Simultáneamente, Japón –dependiente de sus exportaciones, sobre todo de automóviles– sigue sin cerrar un acuerdo con Washington. Los nuevos aranceles punitivos aplicados por EE.UU. suponen un golpe severo a la economía nipona, y condicionan las decisiones del Banco de Japón.
¿Y la Fed? Pausa prolongada con posibles recortes moderados
La próxima decisión de la Fed está programada para el 30 de julio de 2025. El mercado descuenta con más de 93 % de probabilidad que no habrá cambios, manteniéndose el rango actual de tasas entre 4,25 % y 4,50 %. La solidez del mercado laboral estadounidense sigue siendo el principal argumento de Powell para no recortar.
Hacia septiembre, la expectativa de un recorte de 25 puntos básicos crece al 70 %. De materializarse, podría haber otro recorte más antes de fin de año, llevando la tasa a un rango de 3,75 %–4,00 %. Trump, sin embargo, considera que la Fed actúa con excesiva lentitud, argumentando que una rebaja más agresiva permitiría un ahorro multimillonario en el pago de intereses de la deuda pública… aunque su propio paquete fiscal ha agravado el problema de fondo: el déficit.
El Banco de Japón opta por el freno
El Banco de Japón, por su parte, ha decidido mantener su tasa en 0,50 % desde enero. A pesar de una inflación que lleva más de tres años por encima del objetivo del 2 %, la autoridad monetaria prefiere esperar. La subida más próxima, según han adelantado funcionarios del BoJ, no ocurriría antes de marzo de 2026.
El objetivo: conservar margen de maniobra en caso de que los efectos de la política comercial de Trump se intensifiquen. La inflación subyacente se ubicó en mayo en 3,7 %, pero los ahorristas japoneses siguen perdiendo valor real y migrando su capital al exterior ante la baja rentabilidad local.
Análisis técnico del USD/JPY
La acción del precio se analiza en base al gráfico diario. Aplicando un análisis de Fibonacci desde el máximo del 3 de julio de 2024 (161,946) hasta el mínimo del 16 de septiembre de 2024 (139,571), se identifican los siguientes niveles clave:
- Resistencias:
- 148,118 (38,2 %)
- 150,759 (50 %)
- 153,399 (61,8 %)
- 156,666 (76,4 %)
- 161,946 (100 %)
- Soportes:
- 144,852 (23,6 %)
- 139,571 (0 %)
El par podría dirigirse hacia 153,399, coincidiendo con el 61,8 % de retroceso, si se confirma una ruptura alcista. A la baja, el objetivo más claro es volver al mínimo de 139,571.
El RSI (Índice de Fuerza Relativa), con una lectura de 60,30 puntos, refleja una situación de mercado neutral con ligera presión alcista. Los promedios móviles EMA50, EMA100 y EMA200 siguen sirviendo como referencias dinámicas para detectar cambios de tendencia.