En las últimas horas, se ha confirmado la quinta muerte a causa del suero defectuoso de Medifarma, lo que ha desatado una gran conmoción en el país. La nueva víctima es Melissa Guzmán Alarcón, quien falleció tras pasar varios días en la Unidad de Cuidados Intensivos de una clínica en Cusco. La joven había recibido el suero contaminado, lo que le causó graves efectos neurológicos y, finalmente, su deceso. Este caso aumenta la presión sobre las autoridades y la empresa responsable de la distribución del suero.
El ministro de Salud, César Vásquez, no dudó en calificar de “criminales” a los responsables de Medifarma y SANNA, a quienes acusó directamente de no cumplir con los protocolos de seguridad que hubieran prevenido estas muertes. Vásquez mostró su indignación al afirmar que este “error criminal” ha costado la vida de varias personas, y expresó su firme esperanza de que los responsables sean detenidos y respondan ante la justicia.
El suero defectuoso ha causado una serie de complicaciones en las víctimas, principalmente inflamación cerebral y severas alteraciones neurológicas que han resultado fatales. Este nuevo deceso en Cusco ha generado una creciente alarma entre la población y las autoridades, que exigen una investigación más exhaustiva y sanciones ejemplares contra las empresas implicadas en este escándalo.
El ministro Vásquez, además, se prepara para responder ante el Congreso en un pliego interpelatorio relacionado con el cierre del laboratorio Medifarma. Mientras tanto, la familia de las víctimas ha solicitado una investigación profunda para esclarecer cómo llegó el suero defectuoso a los hospitales y clínicas, y han demandado justicia para evitar que más personas pierdan la vida debido a negligencias similares.
