Rosio Torres, congresista de Alianza para el Progreso (APP), ha iniciado su campaña para el Senado de la República en las elecciones de 2026, a pesar de estar siendo investigada por un presunto caso de recorte de sueldo a sus trabajadores. Su campaña quedó evidenciada con la instalación de un panel promocional en Iquitos (Loreto), donde aparece la imagen de la congresista junto con la frase “Senadora 2026”, lo que marca el inicio de su postulación.
La investigación fiscal en su contra está relacionada con supuestos pagos indebidos que habrían sido solicitados a asesores y auxiliares de su despacho entre 2021 y 2023. La Fiscalía sostiene que la congresista habría recibido montos que iban desde los 1.000 hasta los 10.000 soles, los cuales habrían sido transferidos a cuentas bancarias a nombre de su sobrino. Según la acusación, Torres aprovechó su cargo como presidenta de la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales para exigir estos pagos a su personal.
A pesar de la gravedad de las acusaciones, la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales (SAC) archivó la denuncia contra Torres en febrero de 2025. El informe final, elaborado por el congresista delegado Segundo Quiroz, concluyó que no existían pruebas suficientes para continuar con el proceso. La presidenta de la SAC, María Acuña, respaldó la decisión, aclarando que se siguió el procedimiento técnico y legal para archivar la denuncia.
Con su campaña en marcha y la denuncia archivada, Rosio Torres sigue adelante con sus aspiraciones al Senado, confiada en que su situación legal no afectará sus planes políticos. Sin embargo, la investigación por el presunto recorte de sueldo sigue abierta en la Fiscalía, lo que mantiene a la congresista bajo el foco de atención pública mientras se acerca el proceso electoral de 2026.
