En el distrito de Mazamari, provincia de Satipo, Junín, vive la comunidad nativa asháninka Tsiriari, quienes a través de la gestión de la Cooperativa Agraria Asháninka y Nomatsiguenga con Criterios Ambientales LTDA – Coaan LTDA han creado la marca de sostenible de cacao Sankori.
Una iniciativa desarrollada por 75 socios activos dedicados a la producción de cacao, con la asistencia técnica de la Comisión Nacional para el Desarrollo y Vida sin Drogas (Devida), a fin de contribuir a mejorar la calidad de vida de los socios, sus familias y de la comunidad, aplicando la agricultura orgánica y sus conocimientos ancestrales de protección y conservación de bosques, suelos y biodiversidad.
Everaldo Díaz López, miembro de la cooperativa, conversó con Inforegión para comentar el trabajo que vienen realizando, así como el aporte de Devida para asegurar un desarrollo adecuado en producción, transformación, industrialización y comercialización del cacao.
“Nuestro mayor logro es que todos nuestros productos cuentan con certificación orgánica y con registro sanitario. Nos sentimos bien al ver nuestro esfuerzo posicionándose en el mercado y en ese camino Devida ha significado mucha ayuda para nosotros. Pero, considero que aún se deben mejorar las acciones para salir más al mercado”, comentó Everaldo Díaz López.
Reconocimientos importantes
Sankori significa en lengua asháninka ‘hormiga trabajadora’. Para la comunidad nativa Tsiriari esta representa el trabajo en equipo, unidad, ayuda mutua y dejar fortalecida a las futuras generaciones.
Como resultado de su esfuerzo y con el respaldo de Devida, el mes pasado, la Cooperativa Agraria Asháninka y Nomatsiguenga con Criterios Ambientales LTDA logró participar en la XIV edición del Salón del Cacao y Chocolate Internacional, realizado en Lima. La mayor exposición de productores de cacao, chocolatería y proveedores de servicios tecnológicos de esta cadena productiva a nivel mundial.
En dicho encuentro, la comunidad nativa Tsiriari presentó algunos de los productos de la marca Sankori. “Tenemos pasta de cacao para hacer la chocolatada. También, ofrecemos chocolate con leche, chocolate negro al 80% y chocolate bitter al 60%. Por ejemplo, en la región Junín lo que más se vende es el chocolate con leche, mientras que acá en Lima hemos visto que más se llevan el chocolate negro, que es un poco más fuerte”, indicó Everaldo Díaz López, socio activo de la cooperativa.