Un grupo de 39 estudiantes de sexto grado de un colegio en Lima quedó sin fiesta de promoción luego de que un padre de familia, identificado como Jhon Gutiérrez, admitiera haber usado el dinero recaudado para el evento. Cada apoderado había aportado S/ 750, monto destinado a pagar el local, la decoración, el catering y demás servicios.
Padres detectan irregularidades en la organización
La alerta surgió el 14 de noviembre, cuando varios padres solicitaron el cronograma de pagos y actividades. Fue entonces que empezaron a notar inconsistencias en la información proporcionada por Gutiérrez, quien era el encargado de administrar los fondos.
Según denunciaron, incluso niños de otros salones estaban siendo incluidos, lo cual reduciría la cuota, pero el responsable evitaba brindar explicaciones claras sobre los gastos.
Descubren que el local solo recibió un abono mínimo
Ante las dudas, una madre decidió contactar directamente al local contratado para la fiesta. La respuesta confirmó sus sospechas: solo existía un abono de S/ 2,800, cifra muy inferior al total recaudado por los 39 apoderados, que supera ampliamente los S/ 29,000.
Al ser confrontado, Jhon Gutiérrez reconoció que había utilizado el dinero destinado a la promoción. Justificó su acción alegando una emergencia familiar.
Expareja pide que no haya represalias contra la menor
Tras la denuncia de los padres, la expareja del implicado, Elsa Ormeño, señaló que actualmente están separados y que Gutiérrez está gestionando un préstamo para devolver el monto a las familias afectadas.
Asimismo, solicitó que los problemas generados no deriven en represalias contra la menor hija de ambos, quien también cursa estudios en la institución.