Premios a la Resistencia | Luis Carranza: Recuperar las políticas

Su participación en el CADE puso al país tanto en perspectivas como en las necesidades futuras.

por Edgar Mandujano

No es fácil en estos tiempos encontrar a personajes provenientes de la política dignos del reconocimiento (a menos que ya hayan aparecido por estas páginas). Tampoco lo es para el caso del sector público, donde la burocracia ha sido privada de muchos de sus más experimentados miembros en los últimos años. Julio Velarde (Premio de Resistencia 2024) queda como uno de los pocos estandartes dentro de la cancha, pero aún así resulta clamorosa la ausencia de movilizadores por los cambios pendientes. En el Perú se esfumaron las discusiones en torno a las políticas públicas. Desde esa perspectiva, el caso de Luis Carranza resulta peculiar y sugestivo.

Lo primero es porque desde hace varios años trabaja en el sector privado. Lejanos son sus tiempos de exitoso titular del MEF en el segundo gobierno de Alan García. Pero, en segundo lugar, Carranza se ha posicionado como una voz que, al tiempo de señalar las posibilidades “alucinantes” del Perú, que van desde su potencial como hub de entrada al continente asiático a las proyecciones gigantescas que persisten en los rubros mineros y agrícolas, advierte del proceso de degradación de la cosa publica y la capacidad del Estado para proveer servicios públicos adecuados. Una especie de paradoja que podría terminar en un salto al vacío en 2026.

“El clientelismo se ha establecido como base de negociación entre las fuerzas políticas”, alerta. “La idea de reforma, del progreso, ha sido reemplazada por la negociación cruda”.

Consultado, plantea tres pilares de transformación: el primero de infraestructura, con una regla fiscal que garantice su priorización y candados que garanticen su ejecución; el segundo que relance la inversión y le facilite el trabajo a las empresas pequeñas y medianas, ya que la crisis se evidencia en indicadores recientes como el nuevo ranking Business Ready del Banco Mundial dónde el Perú queda mucho peor parado que hace doce años; y el tercero de eficiencia en el gasto público, pues mientras los presupuestos públicos y el volumen de la burocracia se multiplica, la calidad del gasto y los servicios es cada vez más eficiente. Una agenda mínima que debería ir más allá de prismas ideológicos.

También te puede interesar

 Av. Guardia Civil 1321, Oficina 1802, Surquillo, Lima – Perú

Copyright ©caretas.pe | Por Revista Caretas

Todos los derechos reservados

Ilustración Peruana

Este sitio web utiliza cookies para mejorar su experiencia. Asumiremos que está de acuerdo con esto, pero puede optar por no participar si lo desea. Aceptar Leer más

Política de privacidad y cookies