Erradicación histórica: ¿cómo avanza la lucha contra el narcotráfico?
El Gobierno anunció un nuevo hito en la lucha contra los cultivos ilícitos de hoja de coca. Según el Ministerio del Interior (Mininter), el Proyecto Especial de Control y Reducción del Cultivo de la Coca en el Alto Huallaga (Corah) logró erradicar 34 182.14 hectáreas en lo que va del 2025, cifra que supera la meta oficial establecida de 34 123.63 hectáreas.
Esta intervención marca un punto clave para la estrategia nacional de seguridad y control del narcotráfico, especialmente en un año en que el crimen organizado ha incrementado su capacidad de expansión en zonas rurales amazónicas.
El ministro Vicente Tiburcio destacó que este avance “confirma la importancia de sostener operaciones permanentes contra el narcotráfico” y aseguró que su gestión fortalecerá las acciones territoriales para “recuperar cada espacio que hoy ocupa la ilegalidad”.
¿En qué regiones se enfocó la erradicación de coca ilegal?
Las operaciones del Proyecto Corah y la Policía Nacional del Perú (PNP) se intensificaron en 11 ejes operacionales, donde la presencia de cultivos de coca ha sido catalogada como persistente o en expansión. Entre las zonas intervenidas se encuentran:
- Aguaytía
- Tamaya
- Madre Mía
- Putumayo
- Atalaya
- Tingo María
- Constitución
- Caballococha
- Huimbayoc
- Curimaná
- Amazonas
De acuerdo con el informe oficial, se actuó sobre 10 820 parcelas, eliminando además 1345 m² de cama de almácigos, esenciales para la producción inicial de la planta de coca. A ello se suma la destrucción de cinco laboratorios rústicos clandestinos utilizados para la elaboración de drogas, principalmente clorhidrato de cocaína.
La intervención integral evitó la producción potencial de 313.14 toneladas métricas de esta droga, un golpe significativo para las economías criminales que operan en las zonas cocaleras.
Ucayali y Huánuco lideran la erradicación: ¿por qué son zonas críticas?
Según el reporte, las regiones con mayor volumen de erradicación fueron:
- Ucayali: 17 531.80 ha
- Huánuco: 9704.13 ha
- Loreto: 5078.84 ha
- San Martín: 1703.98 ha
- Amazonas: 163.39 ha
El predominio de Ucayali y Huánuco no es casual. Estas regiones, situadas en la franja amazónica del centro y oriente, han registrado en los últimos años un incremento acelerado del cultivo ilegal debido a factores como:
- la presencia de organizaciones dedicadas al narcotráfico y a la producción de drogas sintéticas,
- la debilidad del Estado en zonas remotas,
- la expansión de economías ilegales que coexisten con la madera ilegal y la minería aurífera informal.
En este contexto, el Mininter busca fortalecer la presencia policial y militar, así como mejorar la articulación con gobiernos regionales para reducir el resurgimiento de cultivos erradicados.
¿Qué impacto tendrá esta meta cumplida en la seguridad nacional?
El cumplimiento de la meta anual no solo refleja un avance operativo, sino un cambio en la estrategia estatal contra el narcotráfico. Las medidas que destaca el Mininter incluyen:
- operaciones continuas y no estacionales,
- uso intensivo de inteligencia operativa,
- articulación entre Corah, PNP y autoridades ambientales,
- acciones simultáneas contra economías ilegales complementarias, como la tala y minería clandestina.
La erradicación es un componente, pero no el único. El Mininter busca ampliar la capacidad de interdicción, impulsar la sustitución productiva y reforzar el control territorial en zonas donde grupos criminales buscan disputar el dominio social.
Pregunta clave: ¿basta la erradicación para frenar el narcotráfico?
Si bien la erradicación reduce la disponibilidad de materia prima, expertos advierten que se debe complementar con inversión social, alternativas productivas y capturas de alto valor. Lo que sí es claro es que superar la meta anual representa un avance concreto en el objetivo general del sector Interior.
Estado reafirma compromiso contra economías ilícitas
Con este resultado, el Mininter subrayó que continuará ejecutando “acciones sostenidas, coordinadas y basadas en inteligencia operativa” para enfrentar de manera directa al narcotráfico y sus redes de apoyo logístico. Las operaciones de erradicación siguen en curso, por lo que el balance final del año podría cerrar con una cifra aún mayor.
El Gobierno también reafirmó su compromiso de proteger los ecosistemas amazónicos, afectados por el cultivo ilegal, y fortalecer la presencia del Estado en zonas históricamente vulnerables al accionar criminal.