100 años no son suficientes cuando se tiene una pasión genuina por el aprendizaje. Marta Emma Hernández Lengua, una alma inspiradora que forma parte del programa UNEX PUCP, ha dedicado su vida a la superación personal y a la contribución constante a su familia y comunidad, esfuerzo que le ha permitido ganar el título a la estudiante más longeva del Perú. En el marco del Día del Adulto Mayor, celebramos y honramos a esta figura excepcional que personifica el espíritu inquebrantable del aprendizaje y la vitalidad a lo largo de toda una vida.
Nacida el 1 de enero de 1923 en la histórica ciudad de Ica, Marta Emma es hija de dos reconocidos comerciantes de algodón en la región. Desde temprana edad, demostró un asombroso talento para las matemáticas, habilidad que ha nutrido y cultivado a lo largo de los años.
Su vida es un testimonio de dedicación y perseverancia. Como modista, estudió en la prestigiosa Escuela Francesa y emprendió su propio negocio en el mundo de la moda. No solo dejó una marca indeleble en la industria, sino que también acompañó a su esposo, José Mondragón, un químico farmacéutico de renombre. Juntos, participaron en experimentos químicos para la creación de perfumes, cremas para la piel y anticonceptivos, contribuyendo de manera significativa al avance científico y al bienestar de la sociedad.
Madre amorosa de tres hijos. Marta, además, disfruta de la bendición de tres nietos y una bisnieta, una familia que ha sido enriquecida por su sabiduría y calidez.
Marta Emma le ha dado una nueva mirada a la vejez, una etapa de posibilidades y no de limitaciones. Ella, con todas sus capacidades, enfoca su talento participando del Taller de teatro y expresión creativa del Programa UNEX-PUCP (Universidad de la Experiencia) de la Pontificia Universidad Católica del Perú.
Este programa, que celebra su 23º aniversario de creación, ofrece a las personas adultas mayores un espacio de aprendizaje que contribuye a mejorar su calidad de vida, mantenerse cognitiva y físicamente activos, y enfrentar con éxito el proceso de envejecimiento. Además, fomenta la percepción de esta etapa de la vida como una oportunidad continua para seguir aprendiendo y creciendo.
“¡QUE LINDA ES LA VIDA! ¡CORRE, CORRE QUE TE VOY A ALCANZAR!”, son las palabras que con positivismo, alegría y energía contagian a todos los que tienen el privilegio de conocerla.
En el Día del Adulto Mayor, celebramos a Marta como un faro de inspiración para todas las generaciones, un ejemplo de que la pasión por el aprendizaje y la vida misma nunca deben desvanecerse.