El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) informó, que la noche del martes 3 de diciembre, realizó el traslado más grande de los últimos años de internos del Establecimiento Penitenciario de Lurigancho.
Dicho traslado de los integrantes del Grupo de Operaciones Especiales del INPE, y se realizó por la causal de hacinamiento implicó la salida de 228 personas privadas de libertad del penal quienes venían ocasionando conflicto de relaciones interpersonales, formación de grupos con ideas negativas, y rivalidades entre internos. Entre ellos se encuentran comprendidos 97 internos de nacionalidad venezolana, 09 colombianos y 01 norteamericano.
Adicionalmente, un grupo de 88 internos, durante su permanencia en el penal, no se sometieron a las actividades de tratamiento por lo cual fueron regresionados al régimen cerrado especial, por tanto han sido trasladados a los penales de Ancón I y Chimbote, este último cuenta con un pabellón recientemente inaugurado para dicho régimen. Los internos restantes (140) han sido trasladados a los penales de Ancón II, Ica, Cañete, Huaral, y Chincha.
El presidente del Consejo Nacional Penitenciario (CNP), Javier Llaque Moya consideró que esta medida permitirá que el resto de internos se sometan a las disposiciones institucionales, como tratamiento y seguridad, fortaleciendo la seguridad ciudadana, e invocó a las personas privadas de libertad, especialmente a los de régimen cerrado ordinario a involucrarse en las actividades de tratamiento y evitar así pasar a un régimen más restrictivo.
El INPE continuará desplegando su mayor esfuerzo para cumplir con las normas de seguridad establecidas, a fin de mantener el orden y la disciplina dentro de las cárceles del país.