Acción directa contra la criminalidad organizada desde las cárceles
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) ejecutó un operativo de alto impacto en el penal Ancón I, en respuesta a la creciente ola de extorsiones dirigidas desde los centros penitenciarios contra transportistas en Lima y Callao.
Por orden del presidente del INPE, Iván Paredes Yataco, y en coordinación con la Presidencia de la República, se intervinieron los pabellones 8 y 2, donde se encuentran los internos Adam Smith Lucano Cotrina, alias “El Jorobado”, y Yojairo Arancibia Sevillano, alias “JJ”, este último señalado como la mano derecha de Erick Moreno Hernández, alias “El Monstruo”, cabecilla de una organización criminal.
Incautan tecnología usada para coordinar crímenes desde prisión
Durante la intervención, a cargo de 30 efectivos del Grupo de Operaciones Especiales (GOES) del INPE, se decomisaron:
- Teléfonos celulares
- Cargadores
- Dispositivos WiFi Starlink de alta gama, que habrían sido utilizados para mantener comunicaciones con el exterior y coordinar actos delictivos como amenazas, cobros de cupos y ataques armados.
La revisión abarcó celdas, patios, comedores, duchas y baños, y se realizó conforme a los protocolos establecidos, incluyendo registro corporal de los internos.
Medidas internas: rotación y control del personal
Como parte de una estrategia más amplia para combatir la corrupción penitenciaria, el INPE también anunció la rotación del personal de seguridad y tratamiento en el penal Ancón I.
Asimismo, se solicitó a la Oficina de Asuntos Internos del INPE que abra una investigación para determinar posibles responsabilidades en el ingreso y uso de los dispositivos incautados, en caso exista complicidad interna.
Los materiales decomisados ya han sido puestos a disposición de la Policía Nacional del Perú y del Ministerio Público, para que continúen con las investigaciones respectivas.
Casi 1,800 requisas en tres meses
El presidente del INPE informó que entre julio y setiembre de 2025 se han llevado a cabo cerca de 1,800 requisas a nivel nacional, como parte de la lucha contra la criminalidad organizada desde las cárceles.
Estas acciones se han intensificado en medio de la crisis de seguridad que vive el país, especialmente por los casos de extorsión a transportistas, que han dejado decenas de víctimas mortales solo en los últimos meses.
“El INPE se mantiene firme en su compromiso de frenar el crimen organizado y proteger a los ciudadanos desde todos los frentes”, indicaron voceros del organismo penitenciario.