El titular del Ministerio de Salud, César Vásquez, hizo hincapié en la preocupante realidad epidemiológica que marca el inicio del nuevo año. Confirmó la lamentable pérdida de 13 vidas a causa del COVID-19, resaltando la vulnerabilidad de ciertos estratos poblacionales.
«En la primera semana epidemiológica, tenemos registrados trece fallecidos por COVID-19, todos ellos en grupos vulnerables. Once de ellos son mayores de 65 años con comorbilidades, y los menores de 65 años son dos, ambos tenían enfermedades severas en las que el COVID-19 ha sido el desenlace», declaró el ministro.
La preocupación se agudiza al constatar que el aumento de casos no se traduce en un incremento significativo de ingresos a Unidades de Cuidados Intensivos (UCI), según aclaró Vásquez. Descartó la existencia de una sexta ola de contagios y atribuyó el crecimiento de casos al contagio con el nuevo sublinaje JN1, caracterizado por su alta contagiosidad pero baja letalidad.
«Estamos muy lejos de esas cifras que corresponderían para tal. Ha habido un aumento de los casos, pero la mayoría son pacientes que se han contagiado con el nuevo sublinaje JN 1, no ha habido aumento significativo en ingresos de UCI», afirmó.
Vásquez instó a la ciudadanía a vacunarse, enfatizando que la vacuna representa la medida más segura para proteger a familiares, amigos y vecinos. Además, resaltó la importancia de extremar los cuidados con los adultos mayores y personas con condiciones de salud preexistentes.
Por otra parte, desmintió rumores sobre problemas graves en pacientes jóvenes, explicando que la vacuna bivalente, según datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ofrece protección contra casos graves y fatales de la enfermedad, justificando así el aumento de contagios sin un paralelo incremento en hospitalizaciones y muertes.
