La Asociación de Mártires y Víctimas del 9 de enero en Juliaca (Puno) expresaron su oposición a que policías y militares participen de la celebración de las festividades de la Virgen de la Candelaria cuyo día central es el 2 de febrero.
Protestaron frente a la Federación Regional de Folklore y Cultura, entidad encargada de la organización de esta festividad y exigieron que los conjuntos “Diablada Amigos de la Policía” y “Diablada Centinelas del Altiplano”.
Cabe señalar que los familiares de los 18 civiles asesinados durante las protestas antigubernamentales de Puno del 9 de enero del 2023, también expresaron su oposición a que la presidenta Dina Boluarte y el premier Alberto Otárola participen de estas celebraciones.
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Incluso, el Consejo de Autoridades Originarias de Puno pidió al presidente de la Federación Regional de Folklore y Cultura que no invite a estas autoridades ni a congresistas para “salvaguardar la festividad”.
Sin embargo, tanto la ministra Leslie Urteaga (Cultura) y Juan Carlos Mathews (Turismo) señalaron que la jefa de Estado está dispuesta a viajar a Puno y a todas las regiones del país donde se requiera su presencia.
