Antamina responde a representantes de la Comunidad de Aquia

La empresa minera Antamina ha emitido una respuesta al comunicado que publicó la comunidad campesina de Aquia, ubicada en Áncash. El último 16 de agosto, los representantes de esta última se declararon en sesión permanente debido a que la mesa técnica de alto nivel instalada hace casi dos años para mediar en la pugna, según ellos, no dio resultados.

Los comuneros señalan que la escala de conflictividad social está en aumento debido a que la mesa, a cargo de la Presidencia del Consejo de Ministros (PCM) y de la que participa Antamina, tiene una “limitada lectura social”, persigue y acosa a sus autoridades y busca imponer de forma unilateral, la ejecución de 12 estudios de evaluación de riesgos, transgrediendo los acuerdos de las mesas de diálogo.

A finales de octubre del 2021, los comuneros habían bloqueado los 50 kilómetros de la carretera Conococha – Antamina que está dentro de sus dominios y que es usada por la minera como salida de su mineroducto. En noviembre del mismo año, las vías se desbloquearon por la instalación de una mesa de diálogo con el Ejecutivo, miembros de la minera y la comunidad.

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La empresa señala en su respuesta que:

“La controversia que plantea la Junta Directiva de la CC Aquia es que afirma que Antamina viene usurpado las tierras de la comunidad desde el inicio de sus operaciones. Frente a este reclamo, Antamina ha entregado copias de las escrituras públicas legalizadas de la compra de tierras para su revisión, sin embargo, luego de 2 años, la comunidad no se pronuncia al respecto, pero sigue indicando que Antamina usurpa las tierras sin demostrar por qué continúa con esa afirmación”.

Los representantes de la comunidad, por su parte, insisten en que debe aclararse la adjudicación de derechos reales sobre las tierras en controversia entre los actores, ya que Aquia considera que la actividad de Antamina en las mismas, son ilegales al carecer de permiso de la comunidad.

Antamina también informa que la última reunión de la Mesa de Diálogo se desarrolló el 5 de julio con la participación de la PCM, MINEM, Defensoría del Pueblo y las partes. Sin embargo, la Junta Directiva de la CC Aquia cuestionó la representatividad de los funcionarios de la empresa a pesar de haber recibido un documento notarial suscrito por el presidente de la misma que avala la participación de los 16 funcionarios. Luego de ello, el presidente de la CC Aquia, Adán Damián, permitió iniciar la reunión para proponer 1 año de buenas relaciones a cambio de que el directorio de Antamina participe en las asambleas comunales, le done 3 camionetas y un pull de maquinaria pesada, entre otras solicitudes.

“Frente a la propuesta, Antamina respondió indicando que haría una contrapropuesta a presentar en la siguiente reunión”, se lee en la respuesta. “Tras ello, Adán Damián se retiró abruptamente de la reunión sin firmar acta. Acto siguiente, el vicepresidente de la comunidad pidió que todas las autoridades estatales y funcionarios se retiren del local”.

En enero del 2022, Damián había señalado a CARETAS que no veían el compromiso de la empresa para solucionar el conflicto que tenían. Dijo que los vehículos pesados de Antamina generan daños a las viviendas de la comunidad, además la contaminación que produce el personal de la empresa en las vías donde pasaban.

También adujeron en una carta a la secretaria de Gestión Social y Diálogo de la PCM, que los acuerdos adoptados en la mesa no fueron iniciativa de esta dependencia estatal ni de Antamina, sino que se dieron a cambio de que la empresa pueda usar recursos que estaban en sus tierras.

En otra carta dirigida al presidente ejecutivo de Antamina, Víctor Gobitz, dicen que los compromisos de la empresa no fueron cumplidos en su totalidad y que no tienen voluntad de diálogo.

Sin embargo, si bien el cumplimiento de los puntos de agenda asumidos en noviembre de 2021 tiene retraso por no instalarse los grupos de trabajo debido a las mencionadas objeciones de la junta directiva de la comunidad, Antamina lista una larga de obras y beneficios entregados. Entre ellos una oficina de Gestión Social de la empresa Aquia, 8 antenas de telecomunicación para internet y telefonía móvil (desde este año la comunidad cuenta con ambas coberturas), más de 500 tablets que benefician a todos los estudiantes escolares del ámbito, un camión compactador de residuos sólidos, un comedor para el colegio, campañas de salud visual, y financiamiento y materiales para obras de infraestructura (que incluyen oportunidades de trabajo para los comuneros). 

En proceso, mientras tanto, se encuentra el techado de la loza deportiva, construcción de 3 accesos con pavimento, implementación del alojamiento comunal, entrega de un tractor agrícola y oportunidades laborales con el servicio de limpieza de guardavías, entre varios otros.

A ello se suman otras obras realizadas desde el inicio de operaciones el 2001 tales como el canal de riego Ocupampa – Mutgo, la construcción de los Puestos de Salud de los sectores Pachapaqui, Aquia y Racrachaca, la construcción del Centro Cívico de Racrachaca, trabajos en mejoramiento de vías de acceso, estudios del sistema de agua y desagüe del sector Pacarenca, entre otras iniciativas.

“Antamina ha mostrado y seguirá mostrando siempre su disposición al diálogo alturado y transparente”, reitera la empresa.

Los representantes de la comunidad, por su parte, argumentan quela actividad de la minera dentro de la comunidad (monitoreo geotérmico, uso de carretera, uso de puntos de antenas de comunicación, líneas de drenaje, entre otros), habría destruido restos arqueológicos, ojos de agua, bosques nativos, terrenos de cultivo y otros patrimonios.

*Nota original fue editada para incorporar la respuesta de Antamina.