El exmandatario, quien había sido recluido inicialmente en el penal de Barbadillo, fue trasladado el pasado 22 de agosto al penal de Ancón II por disposición del Instituto Nacional Penitenciario (INPE). Sin embargo, este 27 de agosto, el ministro de Justicia, Juan José Santiváñez, anunció que Vizcarra sería regresado “de manera inmediata” a Barbadillo, lo que se concretó en horas de la mañana.
El traslado se realizó en una furgoneta blanca y bajo un fuerte resguardo policial. Por medidas de seguridad, la Policía Nacional informó que no se permitió la presencia de la prensa en el momento de su llegada al penal.
¿Por qué el traslado y qué dice el Ministerio de Justicia?
La decisión fue explicada por el titular del Ministerio de Justicia, quien señaló que su sector envió una solicitud al INPE para reevaluar la situación penitenciaria del expresidente, considerando el “honor que esta persona tuvo al ejercer el cargo”.
Santiváñez mencionó que se emitió una Resolución Presidencial del INPE (264-2025) que regula la permanencia y clasificación de personas con cargos como el de Vizcarra en centros penitenciarios. En base a ello, se dispuso su retorno inmediato a Barbadillo.
¿Cuál es el contexto judicial de Martín Vizcarra?
Vizcarra enfrenta cinco meses de prisión preventiva dictada por el Poder Judicial, en el marco de la investigación por presuntos actos irregulares en la construcción del Hospital de Moquegua y el proyecto Lomas de Ilo.
Tras el primer fallo, el exjefe de Estado fue recluido en Barbadillo, pero su traslado a Ancón II generó polémica por las condiciones de seguridad y la clasificación penitenciaria. El INPE inicialmente informó que una Junta Técnica había dispuesto enviarlo al penal de Lurigancho, pero luego lo trasladaron a Ancón II “por seguridad penitenciaria”.
¿Cómo ha reaccionado Martín Vizcarra?
En una audiencia reciente, Vizcarra manifestó su incomodidad por los traslados, señalando que le parecían arbitrarios y sin explicación clara. El expresidente afirmó sentirse como “un objeto” al ser movido de un penal a otro sin conocer los criterios o justificaciones del INPE.
Además, señaló que desconocía si su eventual traslado sería a otro ambiente dentro del mismo penal Ancón II o a un centro penitenciario diferente, lo que refleja la incertidumbre y falta de transparencia que ha marcado su reclusión.
¿Qué sigue para Vizcarra y el caso judicial?
Mientras Martín Vizcarra cumple su prisión preventiva, la investigación continúa abierta y la expectativa está puesta en las próximas diligencias y eventuales medidas judiciales. Su traslado y condiciones de reclusión seguirán siendo objeto de atención pública y política.
Este caso, uno de los más mediáticos en los últimos años, sigue generando debate sobre el sistema de justicia, la seguridad en los penales y el trato a expresidentes bajo proceso judicial.