Cambio en la Mesa Directiva tras sucesión presidencial
La crisis política que sacude al Perú tras la vacancia de Dina Boluarte y la asunción de José Jerí Oré en la jefatura del Estado generó también un relevo inmediato en la conducción del Congreso de la República. En cumplimiento del reglamento parlamentario, el primer vicepresidente del Legislativo, Fernando Rospigliosi, asumió de manera interina la presidencia del Congreso.
Rospigliosi, exministro del Interior y actual congresista, tomó el mando para garantizar la continuidad institucional mientras el Parlamento reorganiza su Mesa Directiva. Su designación como presidente interino responde estrictamente a lo establecido en la normativa interna, que señala que ante la ausencia del titular, el primer vicepresidente ejerce automáticamente la conducción del Legislativo.
Perfil político de Rospigliosi
Fernando Rospigliosi es una figura conocida en la política peruana. Fue ministro del Interior durante el gobierno de Alejandro Toledo y ha sido analista político antes de su retorno al Congreso como legislador. Su trayectoria lo coloca como un actor con experiencia en temas de seguridad y gobernabilidad, aunque también es una figura controvertida por sus posturas críticas frente a determinados sectores sociales y políticos.
Su papel como presidente interino del Congreso será clave en un momento en el que el Parlamento debe acompañar la transición política iniciada con la llegada de Jerí a Palacio de Gobierno. La ciudadanía y la clase política estarán atentas a cómo maneja la agenda legislativa en los próximos días.
Congreso en el centro de la tormenta
La sucesión presidencial no solo ha modificado la conducción del Ejecutivo, sino también la del Legislativo. Con la asunción de Jerí en la Presidencia, el Congreso queda bajo la conducción provisional de Rospigliosi, quien tendrá la responsabilidad de mantener el orden interno y convocar, de ser necesario, a nuevas elecciones de la Mesa Directiva.
La coyuntura abre además un nuevo frente de debate: ¿qué tanto respaldo político podrá reunir Rospigliosi para sostener la gobernabilidad en un Congreso dividido y golpeado por la crisis de legitimidad?
¿Cuál será el rol del Congreso en esta nueva etapa?
La pregunta que surge es si el Congreso, bajo el mando interino de Rospigliosi, asumirá un rol de contrapeso responsable frente al Ejecutivo o si se repetirá el escenario de confrontación permanente que ha caracterizado los últimos años. El manejo de esta transición legislativa será determinante para definir el rumbo del país en los próximos meses.
En medio de la inestabilidad, la presidencia interina de Rospigliosi será una prueba inmediata de liderazgo parlamentario y capacidad de diálogo. Su desempeño marcará si el Congreso contribuye a la reconciliación nacional anunciada por Jerí o si, por el contrario, se convierte nuevamente en un epicentro de conflicto político.