Carlos Álvarez, precandidato presidencial por el partido País para Todos, afirmó que el Perú necesita un gobierno de sentido común y no uno atrapado en etiquetas ideológicas. En entrevista con RPP, se pronunció sobre la corrupción, la inseguridad, el sistema judicial y su visión del próximo gobierno. También arremetió contra el ministro de Justicia, Juan José Santiváñez, y cuestionó el respaldo que recibe desde Palacio.
“Ni de izquierda ni de derecha”: ¿una nueva narrativa política?
En tiempos donde los bloques políticos tradicionales se polarizan cada vez más, Carlos Álvarez apuesta por una postura que busca romper con los extremos. En el programa Prueba de Fuego de RPP, el también comediante y ahora precandidato presidencial aseguró que no se define ni como hombre de izquierda, derecha o centro, sino como alguien que busca instaurar un gobierno pragmático, orientado a resolver los problemas más urgentes del país.
“Lo he dicho siempre: no soy ni de izquierda, ni de derecha, ni de centro. El próximo presidente debe ser pragmático, gobernar con sentido común”, afirmó.
Álvarez sostiene que la política debe enfocarse en resultados concretos: hospitales con medicinas, seguridad ciudadana efectiva, educación de calidad y reducción drástica de la anemia.
Una agenda basada en seguridad, justicia y lucha contra la corrupción
Durante la entrevista, Carlos Álvarez presentó sus propuestas centrales para lo que sería un eventual gobierno. Entre ellas, destacan:
- Cadena perpetua para delitos graves, incluyendo corrupción que cause muertes, como durante la pandemia.
- Una comisión de la verdad para investigar irregularidades en la gestión del COVID-19.
- Reforma judicial profunda, con participación de constitucionalistas, académicos y exmagistrados del TC.
- Un sistema de seguridad inspirado parcialmente en el modelo salvadoreño, pero con respeto a los derechos humanos.
- Revisión del artículo 117 de la Constitución, para permitir la investigación de presidentes por corrupción.
“225 mil peruanos que murieron durante la pandemia claman justicia desde sus tumbas”, sentenció.
🧨 Dardos al ministro Santiváñez y al respaldo de Boluarte
Uno de los momentos más intensos de la entrevista se dio cuando Álvarez se refirió al actual ministro de Justicia, Juan José Santiváñez, a quien calificó de “ministro del interror”, en alusión a su paso por el Ministerio del Interior, del cual fue censurado en marzo de 2025.
“Él dice que conmigo no va ni a la esquina. Qué bueno, porque yo jamás iría con usted. Y creo que 34 millones de peruanos tampoco irían con usted ni a la esquina”, ironizó.
Álvarez también cuestionó a la presidenta Dina Boluarte por mantener en el cargo a Santiváñez, insinuando un pacto político que le otorga un poder desmedido.
❓ ¿Puede un discurso antipolítico movilizar al electorado?
Con un tono indignado, directo y apelando a su identidad ciudadana más que a su pasado como humorista, Carlos Álvarez intenta posicionarse como un outsider pero con propuestas concretas. Su retórica se aleja de los discursos tradicionales, aunque adopta un estilo confrontacional y provocador que resuena en una parte del electorado cansado de la clase política.
“La gente está harta. Yo también estoy harto. Soy un peruano más indignado”, enfatizó.
Críticas a la Corte IDH y reforma constitucional
Álvarez también propuso que el Perú salga del Pacto de San José y de la Corte Interamericana de Derechos Humanos, a la que calificó de “ideologizada”. Sin embargo, dejó abierta la posibilidad de una permanencia condicionada, al estilo chileno, con reservas en la ejecución de sentencias.
“La Corte falla sistemáticamente contra el Estado. Chile tiene restricciones y nosotros podemos hacer lo mismo”, afirmó.
Por otro lado, insistió en la necesidad de modificar el artículo 117 de la Constitución para permitir que un presidente en funciones pueda ser investigado por delitos de corrupción.
¿Candidatura en firme?
Aunque su postulación aún no es oficial, Álvarez indicó que participará en las elecciones internas de País para Todos, partido con el que buscará postular a la presidencia en 2026. Aclaró también que no tiene vínculos con Renovación Popular, pese a que mantuvo una conversación con su líder, Rafael López Aliaga.
“No hubo ninguna aceptación de mi parte. Yo sigo en País para Todos, como ciudadano antes que artista”, puntualizó.
¿Populismo o nuevo pragmatismo?
Al observar el discurso de Carlos Álvarez, cabe preguntarse si estamos ante una figura más del populismo electoral o ante una nueva propuesta pragmática en un escenario saturado de eslóganes vacíos. Su promesa de un gobierno basado en el sentido común suena atractiva, pero tendrá que demostrar con claridad cómo planea materializarla sin caer en simplificaciones.