Alejandra Aramayo, jefa de Comunicaciones del Congreso, declaró ante la Comisión de Fiscalización que Julio Talledo, funcionario de confianza del presidente del Parlamento, Eduardo Salhuana, proporcionó la información mencionada en el tuit sobre el caso de la abogada Andrea Vidal Gómez. Al finalizar su intervención, Aramayo reiteró su disposición para colaborar con las investigaciones que el Congreso estimé necesarias.
La funcionaria, quien asumió en octubre, afirmó que su actuación ha sido siempre respetuosa y transparente. “He proporcionado toda la información requerida”, dijo, desmintiendo las acusaciones de haber redactado el comunicado con la necropsia de la extrabajadora del Congreso.
Aramayo indicó que, desde su llegada a la Oficina, no ha enfrentado mayores complicaciones. Aclaró que cualquier problema surgido después de octubre está vinculado al documento analizado en la sesión de fiscalización, y subrayó que se han ofrecido todas las facilidades para una correcta gestión de la información.
La funcionaria destacó las complejidades de la comunicación en el Congreso, una institución caracterizada por tensiones entre diversas bancadas y sus intereses políticos. “El Congreso es difícil de comunicar debido a los intereses específicos de sus bancadas”, admitió. No obstante, Aramayo defendió los esfuerzos de su gestión para dar visibilidad a las actividades de los congresistas y las distintas bancadas, subrayando los avances logrados desde su perspectiva.
Aramayo aclaró sobre el tuit relacionado con la necropsia que formó parte de un proceso de comunicación institucional, pero reconoció que fue un error y que la publicación no debía haberse hecho. “Un tuit es una comunicación inmediata y relevante en una noticia en desarrollo. En este caso, el tuit no tenía la relevancia que se le otorgó, y yo recomendé no publicarlo”, explicó, subrayando que su recomendación fue en contra de la difusión del mensaje.