En el vibrante cruce entre lo teatral y lo terapéutico, María Angélica Vega desata su revolución del bienestar. Con una fusión disruptiva de yoga regenerativo y aceites esenciales suizos, la terapeuta y actriz propone un viaje sensorial que transforma cuerpos y almas, llevando el arte del bienestar a nuevos horizontes.
«No vendemos un producto, ofrecemos un viaje a través de los aromas», declara Vega, una maestra de la escena que ha ampliado su repertorio hacia las tradiciones holísticas y aryuvédicas. En el corazón de su terapia, relanza en el Perú los preciados aceites esenciales y las cremas suizas de Just, una marca con 94 años de historia mundial y más de dos décadas dejando su huella en el país.
La experiencia con Just se despliega como un festín sensorial, guiado por el lema de Vega: «Oler y sentir las cremas y los aceites esenciales. Percibir el efecto en nosotros a nivel físico, mental, espiritual, emocional y termocosmético». Más de 80 productos componen este catálogo que no solo promete bienestar, sino también una posible línea de carrera al incorporarse al equipo de Vega.
Pero el bienestar de María Angélica no se limita a frascos y cremas. Su afamado taller de yoga regenerativo, ubicado en El Jardín de Angélica en Barranco, fusiona distintas disciplinas como hatha yoga, iyengar yoga y pilates. «Recuperar la flexibilidad, la fuerza y la danza en nuestra vida», explica Vega con entusiasmo contagioso.
Los horarios del taller, los lunes, miércoles y viernes de 6 AM a 7:30 AM, los martes y jueves de 8 a 9:30 AM, y en la playa Yuyos de Barranco los mismos martes y jueves de 9:30 AM a 10:30 AM, dan cabida a todos los buscadores del bienestar. «En mi estudio, contamos con todo lo necesario para hacer tu práctica inolvidable y más profunda», asegura, enumerando desde bolsters y cuerdas hasta kombucha y productos Just.
La cita con la salud y el bienestar está servida. María Angélica Vega invita a sumergirse en un universo donde la sanación se vive a través de los sentidos, y el yoga se convierte en una danza de bienestar integral. Con ella, cada sesión es un acto teatral que despierta la conexión entre cuerpo y alma.
