Tras dos temporadas brillantes, la segunda de las cuales acaba de ganar once premios Emmy, rompiendo su propio récord (el año pasado ganó 10), The Bear nos devolvió la esperanza de que todavía se pueden hacer series de calidad sin grandes artificios, sino desde la pasión y la sencillez.
Las premiaciones incluyeron: mejor actor de comedia (Jeremy Allen White, como Carmy), actor de comedia de reparto (Ebon Moss-Bachrach, como “Richie” Jerimovich), actriz de comedia de reparto (Liza Colón-Zayas, como Tina) y dirección (Christopher Storer y Ramy Youssef).
Por lo tanto, es buena oportunidad para recomendar la tercera temporada, recientemente estrenada en Disney+, pues la creación de Christopher Storer ha vuelto con diez nuevos episodios. Si bien no tiene la adrenalina de las dos primeras, definitivamente sigue siendo una de las mejores series que podemos encontrar actualmente en las plataformas.
Se trata de una historia distinta, original y con una gran capacidad para manejar las emociones, los tiempos, el realismo brutal con el que nos acerca al mundo de la cocina y el tacto con el que consigue mostrarnos el mundo interior de todos sus personajes.
Después de la segunda temporada, las expectativas eran muy altas, por lo tanto a muchos les parecerá ver en la tercera un bajón, sobre todo porque queda la sensación de que todo está inconcluso, especialmente al final, porque casi todas las tramas se quedan sin cierre: desde la importante reseña del restaurante que se va a publicar, hasta la reconciliación de Carmy con Claire, pasando por la importantísima decisión que debe tomar Syd e incluso el nuevo postre de Marcus. Desde ya, esperamos la cuarta (y se supone que última) temporada.