El largometraje “Yana-Wara” del director y productor audiovisual de origen puneño, Tito Catacora, se estrena a nivel nacional este jueves 4 de abril.
Tito Catacora nos relata durante esta entrevista lo que fue grabar esta ambiciosa película, sobre todo después de la muerte del co-director, su sobrino Óscar Catacora que falleció, en el 2021, de una apendicitis que no fue atendida a tiempo. Esto sucedido mientras estaban en pleno rodaje.
A pesar de esa irreparable pérdida, el director, junto a todo el equipo, logró sacar adelante el proyecto que ganó una mención honrosa en el Festival de Cine de Lima 2023 y recientemente participó en el Festival de Málaga, España.
La película en idioma aymara trata acerca del fallecimiento de una joven de 13 años, llamada Yana Wara y que se cree que fue asesinada. Su abuelo, Don Evaristo es interrogado por la Justicia Comunal.
Tito Catacora señala que lo que él busca con su última producción es conmover al público abordando temas como la cosmovisión andina, el concepto de justicia comunal y la violencia de género.
Catacora lo tiene claro. El cine es “el séptimo arte” y cuando se habla de desarrollarlo, hay que garantizar que el producto a realizarse sea de la mejor calidad. No duda que “puede haber vertientes como cine de arte, de autor, de entretenimiento o comercial”, dice el director.
En ese sentido, Catacora admite que el cine es de la misma forma una industria, de tal modo que hay quienes buscan atraer al público a partir de la búsqueda de un “pasatiempo” de aproximadamente dos horas como son los largometrajes.
Sin embargo, también están, por otro lado, las producciones cuya prioridad es generar una reflexión en el público y compartir ideas o pensamientos, las cuales entran en la categoría denominada como “cine de autor”.
Catacora no está de acuerdo con el término “cine regional”. Él considera que este debe ser dividido entre “cine andino”, aquel realizado en los poblados de la sierra fuera de las ciudades; “cine amazónico”, aquel desarrollado en la Amazonía; y “cine metropolitano”, aquel desarrollado en Lima y/o las grandes ciudades del Perú. Para este director, cada una de estas regiones del país tienen algo que las diferencia de las demás y es importante tener esto en cuenta.
Desde que Tito Catacora comenzó a hacer cine, el considera que la industria “se ha democratizado” gracias a la era digital. Hace muchos años atrás, hacer una película, más aún en Perú, era una tarea considerada imposible. Ahora el internet ha otorgado mayores posibilidades para aprender teorías y técnicas prácticas para darle sentido a la historia que se quiere llevar a lo audiovisual, y de permitir que el realizador cinematográfico vaya aprendiendo por su propia cuenta.
Catacora reconoce la importancia “del ensayo-error” para adquirir experiencia y, de igual manera, la importancia de difundir un proyecto para adquirir más públicos y tener la opción de competir en los estímulos económicos que el Estado brinda a los realizadores audiovisuales. Presentarse a estos concursos y postular a determinados premios es un arte en sí. Él reconoce que, quién sabía bien cómo moverse en ese ambiente era su sobrino Óscar, quien, además, fue el que lo incentivó a hacer cine.
Tito Catacora nos invita a ver “Yana Wara” con una mirada crítica y dispuesta a comprender las múltiples problemáticas que nuestro país tiene.