Perú ha sido elegido como sede del 15° Festival Internacional de Cine y Comunicación de los Pueblos Indígenas, un evento que reunirá a cineastas, líderes indígenas y colectivos de comunicación de todo el mundo. Organizado por la Coordinadora Latinoamericana de Cine y Comunicación de los Pueblos Indígenas (CLACPI), el festival se celebrará del 20 al 28 de junio de 2025 bajo el lema “Voces e Imágenes de Nuestra Madre Tierra”. Esta edición busca dar visibilidad a los retos, luchas y conocimientos de los pueblos indígenas, particularmente de América Latina, en el contexto de la crisis climática.
Un espacio para la diversidad cultural y la resistencia indígena
El festival, que se realiza desde 1985, promueve el derecho a la comunicación y la autorrepresentación de los pueblos indígenas, acercando sus historias a un público más amplio. “Este festival tiene una larga trayectoria y su objetivo es visibilizar la realidad de los pueblos indígenas y celebrar la diversidad cultural”, destacó Iván Sanjinés, miembro del Centro de Formación y Realización Cinematográfica (Cefrec) y de CLACPI.
“En un mundo lleno de información, es necesario crear espacios de equilibrio donde la expresión, la imagen y la voz de los pueblos indígenas tengan cabida. El derecho a la autorrepresentación es fundamental no solo para los pueblos indígenas, sino también para toda la sociedad, ya que el cine indígena puede ser una herramienta de diálogo intercultural y reflexión. Es importante que la sociedad escuche lo que los pueblos tienen que decir, especialmente en esta época de crisis climática”, agregó Sanjinés.
Luchas de los pueblos indígenas
Este año, el festival tiene un enfoque especial en la mujer indígena, buscando visibilizar su papel en la protección del ambiente y la cultura. “En Perú hay 55 pueblos indígenas, muchos en zonas apartadas de la Amazonía, y nuestro lema busca llevar la voz de las mujeres indígenas a la escena internacional”, señaló Nelly Kuiru, coordinadora de CLACPI. El evento también será una plataforma para exhibir problemáticas que afectan el territorio como la minería ilegal y la deforestación.
“Este festival es un espacio abierto para reflexionar sobre estos temas y comprender que cuando dañamos el bosque o las comunidades indígenas, nos estamos dañando a nosotros mismos”, resaltó Sanjinés. Además de las proyecciones, se llevarán a cabo actividades en diversas ciudades del Perú, incluyendo Lima, Loreto, Ucayali y Ayacucho, y muestras itinerantes en comunidades indígenas.
El cine indígena enfrenta importantes desafíos en la región, como la falta de apoyo económico y la ausencia de normativas que garanticen el derecho a la comunicación para estos pueblos. “Uno de nuestros retos es la falta de políticas claras que apoyen el cine indígena, como sucede en Bolivia, donde ya existen leyes de fomento para este tipo de cine. Necesitamos que más países adopten normativas similares para que el cine indígena tenga un lugar relevante en las agendas comunicativas”, destacó Sanjinés.
Proyecciones y actividades en todo el país
Durante los nueve días del festival, habrá exposiciones fotográficas, muestras de arte indígena y foros sobre la importancia de la comunicación indígena en la defensa del medio ambiente. Se estima la participación de 300 representantes internacionales y nacionales que analizarán el rol de la comunicación indígena en temas clave como la crisis climática y el respeto a los derechos de los pueblos originarios.
El festival incluirá también un taller internacional de cine y comunicación indígena, en el que se discutirán las oportunidades y retos para el cine indígena en América Latina. Además, se conformará un jurado internacional compuesto por cineastas y líderes indígenas para premiar obras en cinco categorías, cada una enfocada en diferentes luchas y expresiones de los pueblos indígenas, como la defensa de la Madre Tierra, los conocimientos ancestrales y la identidad de género y sexualidad.
La edición 2025 en Perú está a cargo de la Asociación Interétnica de Desarrollo de la Selva Peruana (Aidesep), la Escuela de Cine Amazónico (ECA) y el Centro de Culturas Indígenas del Perú (Chirapaq), miembros de CLACPI en el país. Estas organizaciones tienen un destacado compromiso en la defensa de los derechos indígenas y en la promoción y difusión del cine indígena.