El presidente del Consejo de Ministros, Ernesto Álvarez, presentó ante la Comisión de Constitución del Congreso la propuesta para crear la Superintendencia Nacional de Internamiento y Resocialización, que reemplazaría al actual INPE y sentaría las bases para fortalecer la política penitenciaria en el país.
Según Álvarez, la iniciativa busca establecer una institución capaz de garantizar la seguridad en los penales y organizar la correcta distribución de internos, evitando que reclusos de alta peligrosidad se mezclen con los primarios. “Posiblemente no lleguemos a su concreción, pero queremos dejar los cimientos para que el próximo gobierno siga desarrollando la idea y la implemente a cabalidad”, indicó.
Durante la sustentación, el premier destacó que la solicitud de delegación de facultades legislativas por 60 días permitirá implementar medidas urgentes frente a la crisis penitenciaria y la criminalidad, con 26 iniciativas orientadas a seguridad ciudadana, 24 a crecimiento económico responsable y 8 al fortalecimiento institucional. Álvarez estuvo acompañado por ministros de Interior, Justicia, Educación, Economía y Finanzas, entre otros.
Además, aseguró que el Ejecutivo garantizará el presupuesto necesario para Beca 18, evitando la afectación de estudiantes por vacíos financieros. También precisó que la iniciativa para sancionar la filtración de información sobre internos o investigados está dirigida únicamente a funcionarios con acceso a datos sensibles, respetando la labor de la prensa y de las unidades de investigación.
Con esta propuesta, el Gobierno busca dejar estructurados los mecanismos para enfrentar la creciente criminalidad y consolidar la seguridad penitenciaria, a fin de que las futuras gestiones continúen con la implementación de la política penitenciaria de manera sostenida.