La Semana Mundial de Concientización sobre la Resistencia a los Antimicrobianos vuelve a poner sobre la mesa un desafío urgente para la salud pública global: el mal uso de antibióticos y otros antimicrobianos está reduciendo la eficacia de los tratamientos y elevando el riesgo de enfermedades difíciles de controlar. En el Perú, el Ministerio de Salud (Minsa) y el Instituto Nacional de Salud (INS) se suman a esta iniciativa con una agenda de actividades que buscan educar, sensibilizar y promover prácticas responsables entre la población.
Del 18 al 24 de noviembre, el país participa activamente en esta campaña mundial impulsada por organismos internacionales como la OMS, con el objetivo de frenar el avance de la resistencia antimicrobiana, considerada una de las mayores amenazas sanitarias del siglo XXI.
¿Por qué es tan peligrosa la resistencia a los antimicrobianos?
La resistencia a los antimicrobianos (RAM) ocurre cuando bacterias, virus, hongos o parásitos dejan de responder a los medicamentos diseñados para eliminarlos. Este fenómeno, acelerado por el uso inadecuado o excesivo de estos fármacos, compromete la capacidad de tratar infecciones comunes y aumenta el riesgo de complicaciones graves, hospitalizaciones prolongadas y muertes.
Los antimicrobianos —como los antibióticos, antivirales, antifúngicos y antiparasitarios— son esenciales para la medicina moderna. Sin ellos, intervenciones como cirugías, tratamientos oncológicos o manejo de infecciones respiratorias se vuelven peligrosamente inciertos. Por ello, una de las preguntas clave de esta campaña es: ¿cómo evitar que los medicamentos pierdan su eficacia?
El médico infectólogo del INS, Roger Araujo, advierte que la RAM no es un problema exclusivo del personal sanitario:
“La resistencia a los antimicrobianos es una responsabilidad compartida. El uso adecuado de estos medicamentos es crucial para evitar que las infecciones comunes se conviertan en amenazas difíciles de controlar”, señala.
Acción del Minsa e INS: educación, prevención y políticas públicas
Como parte de su compromiso, el INS desarrollará diversas actividades a lo largo de esta semana. Entre ellas destacan:
- Un webinar especializado dirigido a profesionales de la salud y al público en general.
- La difusión de videos informativos en sus plataformas oficiales.
- Acciones de comunicación pública orientadas a promover la comprensión del riesgo que implica la automedicación y el uso inapropiado de antimicrobianos.
Estas actividades responden a una pregunta clave del debate global: ¿qué puede hacer la ciudadanía para frenar la resistencia antimicrobiana?
La respuesta incluye prácticas básicas como no automedicarse, cumplir el tratamiento completo indicado por un profesional y evitar guardar antibióticos “para más adelante”.
Un enfoque multisectorial para enfrentar la crisis sanitaria
La resistencia antimicrobiana es un problema complejo que afecta no solo a la salud humana, sino también a la salud animal, la agricultura y el medio ambiente. Por ello, el Perú adoptó desde 2016 un enfoque de trabajo conjunto bajo el concepto “Una Salud”.
En este marco, el Minsa y el INS impulsaron la creación del Plan Multisectorial para el Enfrentamiento de la Resistencia a los Antimicrobianos, aprobado mediante el Decreto Supremo N.º 010-2019-SA. Este documento oficial dio origen a la Comisión Multisectorial de Naturaleza Permanente, un espacio donde el INS ejerce la secretaría técnica y coordina esfuerzos con otros sectores del Estado.
El propósito central de esta comisión es articular medidas que reduzcan la propagación de infecciones resistentes y promuevan políticas de vigilancia epidemiológica, uso racional de antimicrobianos y control de riesgos en todos los niveles del sistema de salud.
El desafío para el Perú: educación y responsabilidad ciudadana
A pesar de los avances normativos, el principal obstáculo sigue siendo la cultura de automedicación presente en amplios sectores de la población. Por ello, la Semana Mundial plantea una pregunta esencial:
¿cómo asegurar que los peruanos utilicen los antimicrobianos de manera responsable?
El Minsa y el INS coinciden en que la mayor herramienta es la educación sanitaria. Informarse adecuadamente sobre cuándo es necesario usar un antibiótico —y cuándo no— puede marcar la diferencia entre contener o acelerar la aparición de microorganismos resistentes.
Además, ambas instituciones subrayan que la RAM no solo afecta a personas, sino también a los ecosistemas, ya que los residuos de antibióticos mal eliminados pueden contaminar suelos y fuentes de agua, favoreciendo la proliferación de bacterias resistentes.
Llamado a la acción: únete a la campaña global
Este 18 de noviembre, el INS invita a toda la ciudadanía a sumarse a la campaña global, informarse y reflexionar sobre su rol en la lucha contra la resistencia antimicrobiana. El mensaje es claro: cada decisión cuenta.
El INS recuerda a la población que:
- Los antibióticos no sirven para tratar gripes o resfríos.
- La automedicación aumenta el riesgo de generar resistencia.
- Siempre se debe seguir la indicación médica y completar el tratamiento.
- El uso responsable de medicamentos es una práctica de cuidado personal y colectivo.
En un país donde la RAM sigue avanzando silenciosamente, adoptar medidas de prevención y educación es fundamental para proteger la salud de hoy y del futuro.