La psicóloga y terapeuta Fátima Escudero, especializada en Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) y Terapia de Pareja, analiza los desafíos emocionales más comunes en el Perú. Desde su experiencia clínica, señala que los limeños enfrentan altos niveles de ansiedad, depresión y dependencia emocional, muchas veces vinculados al estrés urbano y a patrones culturales profundamente arraigados.
“Trabajo principalmente con Terapia Cognitivo-Conductual”
—¿Qué tratamientos sueles ofrecer a tus pacientes?
Trabajo principalmente con Terapia Cognitivo-Conductual (TCC) y Terapia de Pareja. Me considero más conductista porque me enfoco en ayudar a la persona a identificar sus pensamientos y conductas desde patrones observables. Sin embargo, a veces integro elementos del psicoanálisis, sobre todo cuando es necesario explorar la historia personal o los vínculos tempranos que siguen influyendo en cómo alguien se relaciona hoy.
Trastornos más comunes en Lima
—¿Qué patologías son más frecuentes en los limeños?
En Lima, los casos más comunes son ansiedad, depresión, dependencia emocional y trastornos relacionados con el estrés. También hay muchos cuadros de burnout y somatización, probablemente por el ritmo de vida acelerado y la falta de espacios para el bienestar mental. En los últimos años he visto un aumento de casos con rasgos de Trastorno Límite de la Personalidad (TLP), un diagnóstico poco investigado en nuestro contexto.
“Somos resilientes, pero reprimidos emocionalmente”
—¿Cómo describirías a los peruanos, psicológicamente hablando?
Somos resilientes, pero muy reprimidos emocionalmente. Nos cuesta hablar de lo que sentimos y solemos funcionar en “modo sobrevivencia”. Culturalmente, hemos aprendido a resistir más que a procesar, y eso hace que muchos vivan con angustia o insatisfacción sin entender por qué.
—¿Dirías que seguimos siendo una sociedad conservadora?
Sí. Somos muy cálidos y familiares, pero tenemos miedo a romper estructuras. Nos preocupa mucho el “qué dirán”, y eso frena la autenticidad. Todavía existen tabúes sexuales, creencias machistas y una fuerte resistencia a la terapia, especialmente entre los hombres.
Diferencias entre hombres y mujeres en la terapia de pareja
—¿Qué diferencia más a hombres y mujeres en las terapias de pareja?
Las mujeres suelen buscar comprensión y validación emocional. Los hombres, en cambio, llegan buscando respuestas concretas. Les cuesta dar el paso de asistir a terapia por la idea de que “los hombres no lloran”. Sin embargo, cuando logran abrirse, hacen procesos muy profundos y valientes.
Infidelidad y vínculos rotos
—¿Qué porcentaje de parejas logra reconciliarse o solucionar sus problemas?
Depende mucho del momento en que llegan a terapia. Si acuden cuando aún hay vínculo y voluntad, la tasa de éxito puede ser del 60 al 70%. Pero cuando llegan ya desgastados o con vínculos paralelos, la terapia sirve más para una separación saludable o para aprender a mantener una buena relación parental.
—¿La infidelidad es el síntoma de un problema mayor?
Sí. Casi siempre es consecuencia de un deterioro previo: falta de conexión emocional o vacíos personales. Algunas parejas logran reconstruirse, pero requiere transparencia, compromiso y tiempo.
Sexualidad y emociones
—¿Qué tan importante es la sexualidad en la terapia de pareja?
Muchísimo. No es lo único, pero refleja el estado emocional de la relación. Cuando la pareja está desconectada, casi siempre se nota en la intimidad. Una sexualidad comunicada fortalece el vínculo y genera complicidad.
—¿Qué problemas sexuales son más comunes?
La falta de deseo y la desconexión emocional. En hombres, la disfunción eréctil por ansiedad es muy frecuente; en mujeres, la anorgasmia o los cambios hormonales que afectan la libido.
Machismo aprendido y emociones contenidas
—¿Al hombre peruano le cuesta comunicar sus sentimientos?
Muchísimo. Culturalmente se le ha enseñado que mostrar vulnerabilidad es debilidad. Por eso muchos hombres se sienten incómodos al hablar de emociones o no saben cómo hacerlo sin sentir que pierden autoridad.
—¿La mujer peruana también puede ser machista?
Sí. Muchas crecieron con la idea de que el hombre debe resolver y proteger. Incluso mujeres independientes pueden buscar parejas controladoras o inaccesibles, porque asocian el amor con la idea de ser “cuidadas”.

Sobre la especialista
Fátima Escudero es psicóloga clínica, especializada en Terapia Cognitivo-Conductual, Terapia de Pareja y Psicología Forense. Ha trabajado en instituciones como el INEN y el INABIF, acompañando procesos de alta vulnerabilidad emocional. A través de su espacio digital @yoursafeplace.pe, comparte herramientas de educación emocional y salud mental para promover vínculos más conscientes y equilibrados.