El Poder Judicial volvió a cerrar la puerta a las pretensiones legales de Vladimir Cerrón, líder de Perú Libre, quien permanece en la clandestinidad desde octubre del 2023. El Noveno Juzgado Constitucional desestimó el hábeas corpus presentado por su defensa, que alegaba una vulneración a su libertad individual. Con esta decisión, se mantiene la orden de prisión preventiva de 24 meses por presunto lavado de activos y organización criminal.
La medida fue emitida por el juez Juan Torres, quien concluyó que no existió afectación al derecho constitucional del debido proceso ni a la debida motivación de resoluciones. El pronunciamiento confirma lo resuelto previamente por la Tercera Sala Penal de Apelaciones Nacional y el Sexto Juzgado de Investigación Preparatoria, instancias que rechazaron la variación de la prisión preventiva a comparecencia con restricciones.
¿Por qué Cerrón continúa bajo prisión preventiva?
La Fiscalía sostiene que dentro del partido Perú Libre operaba una organización criminal liderada por Cerrón, cuyo objetivo habría sido consolidar poder político mediante el financiamiento ilícito de campañas y la colocación de allegados en cargos estratégicos.
En este contexto, se le vincula con las redes conocidas como “Los Dinámicos del Centro” y “Los Tiranos del Centro”, que habrían operado en Junín y otras regiones para recaudar fondos irregulares a través de cobros indebidos y designaciones a medida.
El caso que motiva la actual medida de prisión preventiva responde a estos presuntos aportes ilícitos a Perú Libre, investigación que lo mantiene como prófugo desde el 6 de octubre del 2023.
El camino legal de Cerrón: apelaciones y reveses
La defensa legal de Cerrón presentó en los últimos meses varios recursos que han sido rechazados en instancias judiciales. En junio, el Juzgado de Primera Instancia rechazó una solicitud para anular la medida de 24 meses de prisión preventiva, al alegar que no cumplía reglas de conducta.
Posteriormente, se presentó una apelación argumentando que el Tribunal Constitucional había anulado su condena por el caso “La Oroya” y que la Corte Suprema lo había absuelto en el proceso por el Aeródromo Wanka. No obstante, la justicia determinó que estos fallos no anulaban la validez del actual mandato de prisión preventiva.
La resolución emitida el pasado 18 de septiembre reafirma que Cerrón deberá afrontar la investigación fiscal con la medida de coerción más severa, debido al riesgo de fuga y la magnitud de los delitos imputados.
¿Qué significa este fallo para Perú Libre?
La decisión judicial representa un nuevo golpe para el partido fundado por Vladimir Cerrón, que enfrenta un escenario complejo. Perú Libre, que llevó a Pedro Castillo a la presidencia en 2021, ha visto debilitada su estructura política ante las investigaciones por financiamiento ilegal de campañas y los cuestionamientos a sus principales líderes.
👉 La pregunta central es: puede Perú Libre mantenerse como fuerza política sin su líder visible?
Aunque el partido ha intentado recomponer sus cuadros y mantener presencia en el Congreso, la ausencia de Cerrón en el escenario político nacional ha limitado su capacidad de acción y de negociación.
Contexto político: Cerrón y el tablero nacional
El rechazo al hábeas corpus llega en un momento en que el país vive una intensa confrontación política entre el Ejecutivo, encabezado por Dina Boluarte, y la oposición parlamentaria.
En paralelo, voces como la de Betssy Chávez, ex primera ministra, han recordado la falta de voluntad de Cerrón para dialogar con el fujimorismo en 2021, contrastándola con la actual presencia de Perú Libre en la Mesa Directiva del Congreso en alianza con ese sector.
La figura de Cerrón sigue siendo polémica: para algunos, un líder político perseguido; para otros, el centro de una red de intereses oscuros que usó al Estado para fines partidarios.
Próximos pasos en el proceso judicial
El actual mandato de prisión preventiva no es la única causa pendiente contra Cerrón. La Fiscalía mantiene investigaciones abiertas que lo señalan como cabeza de un plan delictivo sistemático, con ramificaciones en el financiamiento político y la administración pública regional.
Si bien su defensa insiste en que los procesos pasados evidencian persecución política, los jueces han sido consistentes en rechazar los recursos presentados, al considerar que los argumentos no desvirtúan las imputaciones fiscales ni el riesgo procesal.
La decisión del Poder Judicial marca un nuevo capítulo en la caída política de Vladimir Cerrón. Mientras se mantiene en la clandestinidad, el fundador de Perú Libre enfrenta un escenario cada vez más complejo, con su libertad comprometida por la justicia y su partido en una encrucijada política.
El rechazo del hábeas corpus reafirma que la lucha contra la corrupción y las organizaciones criminales con alcance político es una prioridad judicial, aunque para los seguidores de Cerrón se mantenga la narrativa de una persecución.
En cualquier caso, el fallo asegura que Cerrón continuará bajo orden de prisión preventiva por 24 meses, un recordatorio de que el poder político no garantiza inmunidad frente a los tribunales.