El presidente del Instituto Nacional Penitenciario (INPE), Iván Paredes Yataco, presentó ante la Comisión Especial Multipartidaria de Seguridad Ciudadana del Congreso una propuesta clave para combatir el problema de hacinamiento en las prisiones peruanas. Su planteamiento principal es fomentar el uso de grilletes electrónicos para personas condenadas por delitos leves, sustituyendo la prisión efectiva por vigilancia remota.
La medida tiene el objetivo de descongestionar los centros penitenciarios del país, cuya saturación es uno de los problemas más críticos que afronta el sistema penal peruano.
Uso actual del grillete electrónico y desafíos presupuestarios
Actualmente, solo 60 personas se encuentran bajo supervisión con grillete electrónico, un número que el INPE busca ampliar significativamente. Para ello, se solicitó un presupuesto de 6 millones de soles al Ministerio de Economía y Finanzas, destinado a adquirir más dispositivos y ampliar la cobertura del programa. Sin embargo, la propuesta presupuestaria fue desestimada en primera instancia, lo que frena por ahora la expansión de esta alternativa tecnológica.
Iván Paredes señaló que la extensión del uso de estos dispositivos debe estar acompañada de una coordinación estrecha con el Poder Judicial, para que los jueces puedan ordenar su uso en lugar de enviar a los condenados por delitos leves a prisión.
Aval del Ministerio de Justicia y coordinación con Poder Judicial
La propuesta cuenta con el respaldo del ministro de Justicia y Derechos Humanos, Juan José Santiváñez, quien apoya la implementación de medidas que contribuyan a deshacinamiento carcelario y promuevan alternativas al encarcelamiento efectivo cuando la naturaleza del delito lo permita.
Paredes explicó que se están realizando conversaciones con el presidente del Poder Judicial y los presidentes de las cortes superiores para lograr un marco legal y operativo que permita la aplicación de vigilancia electrónica en estos casos. Esto representaría un avance importante en el uso de tecnologías para la supervisión y control de los condenados, asegurando su cumplimiento sin necesidad de permanecer en prisión.
Construcción del nuevo penal ‘El Frontón’ y enfoque en seguridad nacional
Durante su intervención, el titular del INPE también se refirió a la construcción del nuevo penal ‘El Frontón’ en el Callao, un proyecto impulsado por la presidenta Dina Boluarte. Este centro penitenciario está diseñado para albergar a los delincuentes más peligrosos del país, con medidas que eviten cualquier posibilidad de fuga o comunicación con el exterior.
“El penal ‘El Frontón’ es una necesidad de seguridad nacional, no solo una solución al hacinamiento”, enfatizó Paredes, destacando que su función será fundamental para mejorar la seguridad ciudadana.
Importancia de la resocialización y seguridad en penales
El presidente de la Comisión de Seguridad Ciudadana, Alfredo Azurín, subrayó la necesidad de que las políticas penitenciarias se orienten hacia la resocialización de los internos, más allá de la mera condena o control.
Iván Paredes complementó este enfoque mencionando que, por indicación del Ministerio de Justicia, se han intensificado las requisas en los penales para mejorar la seguridad tanto dentro como fuera de las cárceles, contribuyendo así a la seguridad general de la población.