¿Qué pasó con el tsunami originado en Rusia?
Un terremoto de magnitud 8.8 ocurrido el lunes 29 de julio cerca de la península de Kamchatka, en Rusia, generó una alerta de tsunami para varios países del Pacífico, incluido el Perú. La mañana del martes, las primeras olas llegaron al litoral norte peruano, específicamente a Talara, sin causar daños materiales ni humanos.
El Instituto Nacional de Defensa Civil (Indeci) y la Dirección de Hidrografía y Navegación de la Marina de Guerra del Perú activaron sus protocolos desde la noche anterior y realizaron un monitoreo permanente del evento. Se confirmó que las olas que tocaron suelo peruano fueron de baja altura, sin capacidad destructiva.
¿Cuáles fueron los efectos en la costa peruana?
Las autoridades reportaron que no hubo afectaciones a viviendas, infraestructura costera ni actividad pesquera. El nivel del mar se mantuvo dentro de los parámetros normales y no fue necesario evacuar a las comunidades ribereñas. Sin embargo, más de 60 puertos en el país fueron cerrados preventivamente, y varias playas y vías costeras permanecen restringidas.
En zonas como Talara, la población se mantuvo expectante, pero sin reportar emergencias. Desde la Marina de Guerra se reiteró que el evento está bajo control y se exhortó a la ciudadanía a seguir únicamente los canales oficiales de información.
¿Por qué las olas fueron menores a las previstas?
El impacto del tsunami en Perú fue menor al proyectado debido a un retraso de dos horas en la llegada de las olas. Inicialmente, se esperaba que alcanzaran la costa a las 10:10 a.m., pero su arribo ocurrió cerca de las 12:10 p.m., tras un tránsito más lento cerca de las islas Galápagos.
Este retraso hizo que las olas llegaran durante la bajamar, cuando el mar se encuentra en su nivel más bajo, y no durante la pleamar, lo que redujo significativamente la altura del tren de olas. Para Talara, por ejemplo, la estimación original era de 2,31 metros, pero finalmente alcanzó solo 1,98 metros.
¿Qué recomendaciones dieron las autoridades?
El Indeci recordó que ante sismos de gran magnitud ocurridos en la cuenca del Pacífico, es fundamental mantener la calma, informarse por fuentes oficiales y acatar las restricciones vigentes. La Dirección de Hidrografía también alertó que el monitoreo continuará en las siguientes horas, en caso de variaciones súbitas en el comportamiento del mar.
Playas, puertos y carreteras cercanas al mar continuarán cerrados hasta nuevo aviso. A empresas portuarias y pescadores se les recomienda mantenerse atentos a los comunicados del gobierno y evitar el ingreso al mar mientras se mantenga la vigilancia.
Aunque el sismo en Rusia activó una alerta internacional, el tsunami que llegó al Perú no representó peligro significativo, gracias a factores naturales como el cambio de marea y la desaceleración del fenómeno en el océano. El evento sirve como recordatorio de la importancia de los sistemas de monitoreo y prevención, así como de la respuesta coordinada entre instituciones.