En medio de la aguda crisis de seguridad que sacude al norte del Perú, el gobernador regional de La Libertad, César Acuña Peralta, realizó una visita oficial a San Salvador el pasado 22 de julio, donde fue recibido por el vicepresidente salvadoreño Félix Ulloa. La agenda incluyó reuniones sobre seguridad ciudadana, lucha contra la violencia, salud pública y educación.
Acuña no escatimó elogios al modelo de seguridad del presidente Nayib Bukele, cuyas políticas —marcadas por la construcción de megacárceles y la militarización de los barrios— han reducido drásticamente los índices de criminalidad en El Salvador, al tiempo que han generado fuertes cuestionamientos por violaciones a derechos humanos.
“La experiencia salvadoreña en la lucha contra la violencia es valiosa para el Perú. Necesitamos trabajar unidos para garantizar entornos seguros y saludables para nuestras familias”, declaró Acuña tras el encuentro, destacando la “bienvenida fraterna” del gobierno centroamericano.
La visita ocurre mientras La Libertad, uno de los epicentros de la violencia criminal en el país, enfrenta una oleada de asesinatos, extorsiones y enfrentamientos entre bandas. En ese contexto, la figura de Bukele —con su discurso de “mano dura” y resultados inmediatos— adquiere atractivo político para líderes regionales como Acuña, que buscan alternativas visibles a un problema estructural.
Además de la seguridad, la reunión abordó temas de cooperación en salud y educación. Ulloa elogió la trayectoria del también líder de Alianza para el Progreso:
“César Acuña representa una historia de superación y liderazgo. Su trabajo en la educación superior, así como su actual gestión en La Libertad, demuestran un compromiso firme con el desarrollo humano y social”, sostuvo el vicepresidente salvadoreño.
El viaje se inscribe en la estrategia internacional de Acuña de reforzar su perfil político y académico, y posicionarse como figura con proyección más allá de su región. Sin embargo, la imitación del modelo Bukele abre un debate: ¿es exportable la fórmula salvadoreña al Perú, con su institucionalidad democrática aún frágil?