El sector privado ha invertido en la industria hidrocarburífera peruana un total de US$ 19,019 millones en el periodo comprendido entre 1993 al 2022. Así lo señaló Arturo Vásquez Cordano, director de investigación de Gerens y exviceministro de Energía del MINEM, en la presentación del estudio “Análisis del impacto del sector hidrocarburos en la economía peruana”, en un evento organizado por la Sociedad Nacional de Minería Petróleo y Energía (SNMPE).
Asimismo, dio a conocer que el aporte de esta industria al PBI nacional en los últimos 17 años equivale al 2% en promedio.
Durante la sesión, también se destacó el impacto de la inversión privada en el desarrollo de las actividades productivas en el sector hidrocarburos y beneficios para el país, como los S/ 62,763 millones en aportes de regalías en el lapso de los años 2002 al 2022, así como el pago de S/ 54,775 millones por concepto de Impuesto a la Renta y otros tributos internos desde el 2005 al 2022.
Vásquez Cordano explicó que las regiones del Perú donde operan las empresas hidrocarburíferas, también se han beneficiado con la transferencia de S/ 45,373 millones por concepto de canon y sobrecanon en el período desde 2004 hasta el 2023.
Inversiones en el norte del Perú
Un ejemplo de las inversiones efectuadas por las empresas privadas del sector lo representan las realizadas en la costa noroeste y el zócalo continental, donde se registró un total de US$ 4,444 millones en actividades de exploración y explotación en esta región, entre 1993 y 2022.
En esa línea, destacó que, en dicho periodo, la región de Piura recibió S/ 8,110 millones por concepto de canon y sobrecanon; mientras que Tumbes percibió S/ 2,397 millones.
Potencial de uso de recursos generados por aportes en la costa norte
El director de investigación de Gerens explicó que con las regalías y retribuciones generadas por el sector hidrocarburos en la costa noroeste y zócalo continental en los últimos 22 años (S/ 30,580 millones) se podría haber financiado diferentes obras públicas, tales como 402 Colegios de Alto Rendimiento (COAR); 49,43 postas médicas comunales para atención primaria; 185 hospitales regionales de alta complejidad; 57,338 kilómetros de caminos afirmados- vías de penetración; una carretera de 236 km modelo “Daniel Alcides Carrión”; o 5,365 kilómetros de carreteras asfaltadas.
Licitaciones competitivas como solución a la necesidad de inversiones
De otro lado, Vásquez analizó la asignación de lotes petroleros en países como Colombia, Argentina, México y Brasil, que se rigen por los principios de libre competencia, y convocatoria y concurrencia de postores nacionales e internacionales. De esta manera, -afirmó- se logra la maximización del valor de inversión mediante procesos competitivos.
Tras el análisis de estos casos, se llegó a la conclusión que la política adoptada recientemente de asignar lotes petroleros de la costa noroeste (Talara y zócalo continental) mediante negociación directa sin concurso o licitación internacional es inconsistente con las buenas prácticas internacionales.
Por ello, Vásquez hizo un llamado para promover licitaciones internacionales competitivas que maximicen la inversión para la exploración y explotación de hidrocarburos, generen el máximo valor para la recaudación de regalías petroleras y gasíferas para el Estado, así como mayores transferencias por canon a las regiones.
Finalmente, comentó que en 1993 PerúPetro registró la existencia de 143 millones de barriles en reservas probadas de hidrocarburos líquidos en la costa noroeste y el zócalo continental.
De esta manera, anotó que, si se considera que la producción acumulada entre 1993 y 2022 fue de 392 millones de barriles, entonces los contratistas petroleros con las inversiones que realizaron (US$ 4,444 millones) permitieron descubrir 399 millones de barriles adicionales de hidrocarburos líquidos en ese periodo. Esa cantidad no existía cuando se aprobó la Ley Orgánica de Hidrocarburos en 1993.