No solo para niños: el juego influye en el desarrollo personal de los adultos

Y es que jugar no solo representa una fuente de entretenimiento sino que también se convierte en una necesidad vital que influye en el bienestar emocional, físico y mental de las personas en cualquier etapa de su vida.

por Edgar Mandujano

El desarrollo de las personas se fundamenta en múltiples factores significativos que se desenvuelven a lo largo de los años. Uno de ellos, por ejemplo, es el juego. Y es que jugar no solo representa una fuente de entretenimiento sino que también se convierte en una necesidad vital que influye en el bienestar emocional, físico y mental de las personas en cualquier etapa de su vida.

“A menudo relacionamos erróneamente el juego como una actividad exclusiva de la infancia, cuando en realidad se debería traducir como una herramienta poderosa para el bienestar absoluto de cualquier persona sin importar su edad. Su valor radica en varios aspectos claves que tienen impacto en el desarrollo personal y social de los seres humanos, promoviendo habilidades cognitivas y físicas esenciales”, afirma Miguel Estupiñan, Gerente Comercial de LEGO en Perú.

En ese sentido, el especialista señala cuatro beneficios del juego en el desarrollo personal: 

  1. Mejora las habilidades cognitivas: Jugar contribuye con el desarrollo de múltiples habilidades mentales fundamentales para el aprendizaje y la socialización. De ese modo, se estimulan factores claves como el pensamiento lógico, la resolución de problemas y la capacidad de la memoria.
  2. Produce bienestar emocional: Al jugar uno aprende a expresar y canalizar emociones de forma constructiva. Enfrentarse a la derrota y a ciertas dificultades ayudará a incrementar la resiliencia, controlando la frustración y reforzando el autocontrol emocional.
  3. Fomenta la creatividad: El ambiente del juego permite explorar ideas, crear nuevos escenarios y usar la imaginación sin restricciones. Ello ayuda a fortalecer una mente flexible y abierta, con facilidad para la adaptación lúdica y la innovación.
  4. Fortalece la autonomía: El juego invita a reflexionar sobre los intereses propios y la toma de decisiones. Asimismo, los logros y el éxito en los juegos mejoran la autoestima y el reconocimiento de la identidad, formando personas más seguras de sí mismas.

Ya que jugar dinamiza el crecimiento y fortalecimiento armónico del cuerpo, la inteligencia, la afectividad y la sociabilidad, es imprescindible encontrar los medios necesarios para poner en práctica esta actividad lúdica.

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