Zurdos como cancha

Por: Bryan Condor | Proliferación de partidos podría llevarnos a elecciones con 37 candidatos y un nuevo gobierno marcado por la fragmentación. Y si la derecha se divide, la izquierda no se queda atrás.
Tribuna popular. Con megáfonos y Wiphala, ciudadanos arman singulares debates políticos en la Plaza San Martín.

En un ambiente político como el peruano, candente con o sin verano, 12 partidos políticos están calentado en la banca los que están en proceso de inscripción y buscan unirse a las 25 organizaciones ya inscritas en el Jurado Nacional de Elecciones (JNE). Si bien, las elecciones están programadas para el 2026, en el Perú nunca se sabe si la fecha podría adelantarse.

Concentrar los votos

El politólogo Luis Nunes estimó que la proliferación de partidos políticos podría fragmentar la representación política, lo que a la larga podría traer problemas de gobernabilidad y de legitimidad a quien gane unas eventuales elecciones. Tener un presidente sin el respaldo de una bancada fuerte es el primer riesgo. “Ya sabemos lo que pasó con PPK”, recuerda.

Consideró que los espectros ideológicos deberían estar representados por un máximo de ocho partidos y que el JNE debería ejercer una mayor fiscalización a la inscripción de los partidos ya que en América Latina cuesta alrededor de 1 o 2 dólares conseguir una firma para lograr inscribir una organización política, dice el especialista.

La receta para poder evitar la fragmentación serían los frentes. El problema, estima Nunes, es que “nadie quiere ceder”, pese a las notables coincidencias que hay entre partidos. Para mantener estos frentes una vez ganadas las elecciones, habría que negociar. Como ejemplo, el politólogo pone la alianza entre el presidente argentino Javier Milei y su ex rival, Patricia Bullrich. “Cuando se quiere, se puede”, sentencia. 

Si bien, la fragmentación en la derecha peruana se evidenció sobre todo en la composición del actual Congreso de la República, la izquierda no se queda atrás y suma más partidos a su ya abultado club de miembros.

Duberlí se Lanzó

Duberlí se alía con ronderos y ML19.

En el segundo piso de una galería comercial en la plaza de armas de Lima, se presentó el jueves pasado el partido Unidad Popular -no confundir con el Movimiento por la Unidad Popular del exministro de Salud Hernando Cevallos-, del expresidente del Poder Judicial, Duberlí Rodríguez. La reunión también sirvió para sellar la alianza con la Central Única Nacional de Rondas Campesinas (Cunarc) y con el ML19.

Rodríguez, también abogado del expremier Aníbal Torres, no oculta sus intenciones de ser candidato presidencial, aunque deja esa decisión en manos de la militancia. Señala que le gustaría que su primera vicepresidenta sea una rondera y su segundo vicepresidente podría ser Santos Saavedra, titular de la Cunarc.

Aspiran a presentar una sola candidatura izquierdista de cara a las próximas elecciones “pero eso se verá en su momento”, dice Rodríguez.

Humala quiere “bukelizar” el país.

Pone énfasis en la seguridad ciudadana. Proponen instaurar las “rondas urbanas” en las ciudades del país y mantener la investigación preliminar en manos de la Fiscalía de la Nación.

En el ámbito económico, proponen cobrar las deudas a las grandes empresas del país y aumentar los impuestos para quienes tienen mayores ingresos.

Consideran que el Estado debe tener presencia en la explotación de recursos estratégicos como el litio y priorizar a los empresarios nacionales en la actividad económica. También propone impulsar las cooperativas en el marco de una “economía popular o solidaria”.

Tomando su experiencia como titular del PJ, propuso crear una entidad que forme desde el inicio a los operadores de justicia. Otra de sus propuestas es implementar la figura del jurado, compuesto por tres abogados y tres civiles para resolver las controversias judiciales, para garantizar la independencia de los jueces ya que considera que actualmente son “mesa de partes de la Fiscalía”.

UP también tiene sitio para las propuestas polémicas; facultar el voto para los mayores de 16 años y legalizar la venta de drogas, lo que, en opinión de Rodríguez, “acabaría con el negocio”.

Pepitas de oro

Voces del Pueblo (VP), partido que podría alcanzar su inscripción a finales de marzo, es la plataforma que podría tener como candidato al congresista Guillermo Bermejo. Una de sus propuestas bandera es la convocatoria a una Asamblea Constituyente. En conversación con esta revista, el presidente de esta organización, Ronald Atencio, comenta que ven con sumo interés el desarrollo de la minería. Hay que recordar que, durante un período del gobierno de Pedro Castillo, Bermejo tuvo significativa influencia en ese ministerio.

El también asesor principal de Bermejo sostuvo que la posición partidaria es que el Estado garantice un desarrollo minero que prevenga el “saqueo” de los recursos y que indemnice adecuadamente cuando haya negligencias o accidentes. Proponen también que el oro y la plata producidos en nuestro país sean certificados por alguna entidad nacional, como el BCR.

Atencio considera que es mejor tener identificados a los mineros en vías de legalizarse y señala que el Estado debería tener un papel más activo, cuestionando lo largos que pueden llegar a ser estos procesos. Incluso, dejó abierta la posibilidad de flexibilizarlos en algunos casos, debido a las dificultades que conlleva para algunos mineros informales.

La inscripción del partido de Bermejo estaría lista en marzo.

El partido con sede en San Juan de Lurigancho considera primordial cambiar el régimen económico de la Constitución, dando al Estado “un papel más activo”.

Respecto a las reformas políticas, consideran que la cuestión de confianza no debería estar reducida al punto de que el Ejecutivo no pueda “ejercer control” sobre el Congreso y cuestionó el uso de la vacancia por incapacidad moral permanente como un método de destitución de facto en la que cualquier cosa puede ser una causal. Proponen también más candados para la suspensión presidencial y la censura a los ministros.

Velasquismo mariateguista

La pequeña oficina del Partido de los Trabajadores y Emprendedores del Perú (PTE) está ubicada dentro del local del partido Patria Roja en el Centro de Lima. Napoleón Becerra, su presidente, es un policía municipal de la Municipalidad Metropolitana de Lima y asegura estar preparándose desde hace más de 40 años para llegar a la jefatura del Estado, aunque aclara que los candidatos se elegirán en internas.

Dice que los principios del partido son la justicia y la equidad y que “recogen lo bueno” de José Carlos Mariátegui y el general Juan Velasco Alvarado. Se suman a quienes consideran que debe cambiarse la Constitución y pone énfasis en el “cambio estructural” de instituciones como el Poder Judicial, el Ministerio Público y la Policía Nacional.

Napoleón Becerra sueña con la banda presidencial.

Considera que se debe “renegociar” la recuperación de las empresas estatales vendidas y de no conseguirlo, el Estado debe crear empresas que compitan con las del sector privado.

Señalan que los aspirantes a ministros de Estado que estén en una terna propuesta por el presidente de la República, deberían competir para que garantizar que el más capaz ocupe el puesto.

Asegura, además, ser el único partido que no cuenta con sentenciados entre sus afiliados. Respecto a la corrupción, su propuesta inicial es sancionar este delito y el de violación con la pena de muerte. De encontrar trabas por parte del Sistema Interamericano de Derechos Humanos, se optaría por la cadena perpetua. Becerra es un hombre que conoce su importancia, ya que una sentencia de esta instancia le ayudó a recuperar su trabajo en la MML tras ser despedido en la gestión de Alberto Andrade.

Expectantes

Ninguna candidatura se descarta en pleno camino a la inscripción partidaria.

Vizcarra y Chiabra buscarían formalizar candidatura. Sorprende el ingreso de Espá y
Molinelli al ruedo político.

Una posible candidatura de Martín Vizcarra no puede descartarse y menos teniendo ya inscrito a su partido Perú Primero. Si bien cuenta con múltiples inhabilitaciones, la estrategia a seguir en caso de ganar las elecciones, sería ejercer mediante medidas cautelares. Antauro Humala ya empezó su campaña prometiendo “bukelizar” en Perú, postura similar a la del cómico Carlos Álvarez, quien se comporta como un candidato en campaña.

Unidad y Paz, partido del congresista y aspirante a presidente de la República, Roberto Chiabra, también está a la espera de que el JNE le dé luz verde. Si bien, el partido tiene ya algunos locales en los que recolecta las firmas que necesitan, carece de dirigentes partidarios.

El partido de Chiabra, según su ideario, propone conservar la Constitución y el modelo económico, pero replanteándose la descentralización. También está en sus planes promover la agricultura familiar, la agroexportación, la pesca de consumo humano, la minería y el turismo. La inteligencia artificial jugaría un papel primordial en el desarrollo económico.

De otro lado, Fuerza Moderna, el partido de la expresidenta de EsSalud, Fiorella Molinelli, es una sorpresa entre los partidos que están en pos de la inscripción. Esta organización pone el énfasis en la sostenibilidad ambiental, la igualdad de género, la descentralización con reconocimiento a la diversidad cultural del país y la defensa de los derechos humanos. 

Álvarez declara como candidato y Cevallos impulsa partido.

En la lista de partidos que esperan ser incluidos en el Registro de Organizaciones Políticas (ROP) están Nuevo Perú, cuya cara más visible es la excandidata presidencial, Verónika Mendoza; el partido Cívico Obras, de Ricardo Belmont; el partido del Buen Gobierno del exministro Jorge Nieto; el Partido Popular Cristiano de Carlos Neuhaus; el partido Progresemos, autodenominado como el único partido ecologista y amante de los animales; País Para Todos de Vladimir Meza, exalcalde de Huaraz; el partido Centro Unidos; y el partido Sí Creo del periodista Carlos Espá.