Tomás Gálvez asumió como fiscal de la Nación interino tras la suspensión de Delia Espinoza y el rechazo de Pablo Sánchez y Zoraida Ávalos a ocupar la titularidad. En su primera semana al frente del Ministerio Público, Gálvez confirmó a medios locales que evalúa la continuidad de los fiscales Rafael Vela y José Domingo Pérez, responsables de la investigación del caso Odebrecht.
“Lo estamos evaluando”, indicó, al ser consultado sobre la posibilidad de formalizar su intención de removerlos, recordando declaraciones anteriores en las que aseguró que, de asumir, los apartaría “en el acto” por presunto encubrimiento en la devolución de S/524 millones a Odebrecht tras la venta de la hidroeléctrica de Chaglla.
Antecedentes de confrontación con el Equipo Lava Jato
La postura crítica de Gálvez hacia Vela y Pérez no es nueva. En 2020, los denunció por presuntos delitos de falsedad ideológica, peculado y encubrimiento, acusándolos de favorecer los intereses de la constructora brasileña en perjuicio del Estado peruano.
Esta situación remite a diciembre de 2018, cuando el entonces fiscal de la Nación, Pedro Chávarry, separó temporalmente a ambos fiscales del equipo Lava Jato, alegando que sus declaraciones públicas comprometían la autonomía y reserva del Ministerio Público. La decisión generó rechazo público, incluyendo protestas en Plaza San Martín y la reacción del Ejecutivo encabezado por Martín Vizcarra, quien manifestó su respaldo al Equipo Especial.
La reacción ciudadana y política
Las decisiones de Gálvez y Chávarry sobre los fiscales han generado históricamente una fuerte reacción social y política. En 2018, ciudadanos se movilizaron exigiendo la restitución de Vela y Pérez y denunciando intentos de desmantelar las investigaciones de corrupción de Odebrecht.
Ahora, la posible remoción de los fiscales bajo la gestión de Gálvez vuelve a colocar al Ministerio Público en el centro de la atención pública, en un contexto de alta presión mediática e institucional, marcado por investigaciones clave de corrupción y la gestión interina del fiscal de la Nación.
Incertidumbre sobre el futuro del caso Lava Jato
Aunque no está claro si la intención de Gálvez es remover a Vela y Pérez del Ministerio Público o solo del Equipo Especial Lava Jato, la decisión podría afectar la continuidad de investigaciones contra grandes casos de corrupción, incluyendo Odebrecht y otras constructoras brasileñas.
El nuevo fiscal interino deberá balancear la presión social, la legalidad de sus decisiones y la estabilidad institucional, mientras el país observa atentamente el futuro del Ministerio Público y de los fiscales responsables de la lucha anticorrupción.