El Gobierno ha nombrado al general en retiro Alejandro Washington Oviedo Echevarría como nuevo jefe de la Dirección Nacional de Inteligencia (DINI), tras la salida de Max Anhuamán Centeno. La designación fue formalizada mediante una resolución publicada en el diario oficial El Peruano, firmada por la presidenta Dina Boluarte y el primer ministro Eduardo Arana. La medida ocurre en un momento de sensibilidad política y demandas de mayor transparencia institucional.
Oviedo Echevarría, exjefe de la Dirección de Inteligencia de la Policía Nacional, cuenta con amplia experiencia en operaciones policiales, aunque su historial incluye episodios controvertidos. En 2019, fue retirado de su cargo tras una denuncia del expresidente Alan García por presuntas interceptaciones telefónicas. Si bien no se comprobó responsabilidad penal, el hecho dejó secuelas políticas que hoy resurgen con su nuevo nombramiento.
El general en retiro también fue investigado por la Fiscalía durante la emergencia sanitaria por supuestas irregularidades en la adquisición de equipos de bioseguridad mientras estaba al frente de la macro región policial de Junín. Aunque el caso fue archivado, la Contraloría advirtió perjuicios económicos al Estado, lo que ha reavivado los cuestionamientos sobre su idoneidad para liderar un organismo tan estratégico.
La DINI, encargada de producir inteligencia para la toma de decisiones de alto nivel, requiere una conducción técnica, con credibilidad y autonomía. El nombramiento de Oviedo, en vez de cerrar una etapa, podría abrir un nuevo frente de debate sobre el manejo de los servicios de inteligencia y la necesidad de fortalecer los mecanismos de control en una de las instituciones más sensibles del aparato estatal.