Tras conocerse la elección de Darwin Espinoza Vargas, como vocero titular del Grupo Parlamentario, quien es investigado por el caso “Los Niños” y cuestionado recientemente por la presunta gestión de reuniones en Sedapal a favor de la empresaria Sada Goray, desató la crisis en el partido de la Lampa y con ello la renuncia irrevocable de 8 de sus miembros.
La primera en presentar su dimisión fue la parlamentaria María del Carmen Alva Prietto; seguido del congresista Ilich Fredy López Ureña; minutos más tarde Silvia María Monteza Facho también presentó un oficio renunciando al partido de la Lampa. La cuarta baja fue de parte del congresista José Alberto Arriola Tueros; y la quinta renuncia a la bancada vino de parte de José Carlos Mori Celis.
Horas después, se supo que la congresista Karol Paredes también renunció, en desacuerdo por el nombramiento de Espinoza Vargas como vocero. El congresista Pedro Edwin Martínez Talavera siguió la misma línea y renunció de manera irrevocable. La octava renuncia vino por el lado del parlamentario Carlos Enrique Alva Rojas.