La Agenda País de PPK

Entrevista: Enrique Chávez | Expresidente prioriza los pasos que demanda el Perú para volver a una senda de progreso.
PPK respondió a preguntas que tienen que ver sobre la actualidad del país y los pasos necesarios para volver a ponerlo en la dirección correcta.

El expresidente Pedro Pablo Kuczynski es el protagonista de la última portada de la edición impresa de CARETAS. En la entrevista hace revelaciones sobre el papel de Martín Vizcarra en lo que califica como una conspiración para sacarlo del poder en 2018 e identifica la que considera la falla de origen en la actual situación del Ministerio Público, que fue la modificación del Código Procesal Penal durante el gobierno de Alejandro Toledo, la que le dio demasiados poderes.

También cuenta como, hace aproximadamente año y medio, el fiscal José Domingo Pérez le ofreció ser colaborador eficaz en el caso de Toledo, que todavía no había sido extraditado, y que él respondió que no contaba con información nueva sobre ese caso. Se trata de una anécdota que podría demostrar que Pérez es consciente de la debilidad del caso de Kuczynski (¿por qué sino le propondría delatar a su antiguo jefe?), que a los 85 años sigue separado de su familia y enfrenta una absurda acusación fiscal en la que toda su carrera es calificada como una dilatada operación de lavado de activos.

Pero, además de esas revelaciones, PPK respondió a preguntas que tienen que ver sobre la actualidad del país y los pasos necesarios para volver a ponerlo en la dirección correcta. Adelantó que se encuentra escribiendo un libro sobre los proyectos que necesita el Perú y en esta segunda parte de la entrevista subraya la importancia de algunos de ellos.       

¿Cuáles deberían ser las prioridades actuales para reencausar el país?

La primera es tener el dinero para hacer los proyectos. Para hacerlo hay que mantener el grado de inversión que nos costó tanto lograr y que se ha mantenido, en gran parte debido al Banco Central. Eso cambia la ecuación en 100%. Nos da acceso a plata, etcétera. Lo segundo es arreglar el presupuesto porque en este momento se tiene un fuerte déficit.

¿No es buena idea endeudarse mucho más como postula la Sociedad Nacional de Industrias?

No, no, son locuras. Basta con mirar el mundo. Y a quien le va bien y quien está quebrado.

¿Cree que el ministro del MEF José Arista puede arreglar la casa?

Fue mi director de Presupuesto y tiene la capacidad para mantener esto bien. Pero obviamente hay que darle impulso al país. No solo con programitas sino con políticas. Ahora se está viendo, por ejemplo, que la exportación de la agroindustria ha seguido subiendo pero el empleo ha bajado. Hay una actitud ambivalente frente a la agroindustria y eso hace que la inversion no venga. Hace 30 años la agricultura estaba en cero y ahora tenemos empresarios agrícolas -algunos chicos, otros medianos- que están haciendo cosas increíbles. ¿Quién iba a creer que en el Perú íbamos a producir frambuesas y exportarlas a un supermercado estadounidense? Eso es lo primero.

¿Qué sigue?

Terminar los grandes proyectos de riego que se empezaron y se pararon. Yo arranqué, simbólicamente es cierto, la tuneladora en Majes. Se movió un centímetro y sigue en el mismo sitio. Después, como dice el ministro de Energía y minas, hay que sacar adelante la lista de 15 o 20 proyectos, varios de los cuales están listos.

¿Es inteligente empezar por Tía María o se puede incendiar la pradera?

Con Tía María hay muchas ideas erróneas. No es que el polvo del camino va a caer sobre el Valle. El viento viene del sur y se va para el norte, al revés. Y el agua para la mina la van a sacar del mar.

¿Qué le parece el ministro Rómulo Mucho?

Ahora lo critican porque tiene la empresa de voladuras de minerales más importante del Perú. Entonces todas las minas de cierto tamaño son sus clientes. Pero lo deja claro y le pone fideicomiso a la empresa. Es un hombre que se ha hecho solo. Empezó en Puno. No hay que desperdiciarlo.

Entre proyectos paralizados y una montaña de requisitos, invertir en el Perú es cada vez más difícil. ¿Cómo reformar el Estado?

Yo planteaba simplificar un poquito el Estado. Eso se habla desde que tengo uso de razón. En la época de Prado y en el gobierno de Belaúnde, ambos gobiernos donde estuve, se hablaba de desburocratizar y etcétera. Diría que lo más importante es mejorar la Educación y la Vivienda. Con la educación las cifras son aterradoras. Los colegios se caen. Eso cuesta un platal. Y hay que estandarizar las cosas porque es un tipo de hospital en Ayacucho y otro en Chiclayo. Por otro lado, propongo 2 millones de viviendas nuevas, número que hay que aumentarle a las viviendas que se van a tener que reemplazar porque se caen. Esos 2 millones los podemos hacer, pero con un plan urbano. Hay que ponerse de acuerdo con el Ejército, que tiene cuarteles en muchas ciudades en zonas atractivas para viviendas, y pagarle un justiprecio que la Fuerza Armada aprovecharía para mejorar su sistema de pensiones, que está quebrado.

Una propuesta suya para llegar al gobierno fue la de cerrar totalmente la brecha de agua y saneamiento. ¿Cómo la actualizaría?

No es solamente ponerle agua al caño. También planificar porque en 30 o 40 años los glaciares ya no existirán. Se tiene que hacer que haya agua que pase hacia la costa. Si no tampoco habrá en el centro y el sur. El norte es distinto. Y eso se hace estando atrayendo el aguda de lluvia y haciendo algunos trasvases más. 3s Y luego están las EPS (Empresas Prestadoras de Servicios). Ninguna está financieramente viable. Todas están quebradas.

¿Para ayudaría una nueva ronda de privatizaciones?

Yo me opuse a la privatización del agua porque veía lo que pasaba en Inglaterra con Thames Water, que tiraba el agua al Támesis. Los desagües la endeudaron hasta siete veces en sus fondos. El tema es que, a diferencia de la electricidad, el agua no tiene competidor. Es decir, se le da un monopolio al que la maneja. Por eso a mí no me gusta la idea de privatizarla. Pero hay que reformarlo completamente. Se pueden privatizar varias cosas como la cobranza, el mantenimiento, que es lo que está haciendo Sedapal ahora. En el resto del país hay 45 o 50 EPS que quebradas. Ahí hay que hacer un cambio muy profundo.

El directorio de Petroperú acaba de ser cambiado. ¿Tiene solución?

Eso es cambiarle de nombre al muñeco. El tema es por qué Petroperú pierde tanta plata. No se ha explicado bien. Es una combinación de cosas. Está el peso de la deuda de la nueva refinería de Talara pero también los subsidios.

¿Pesa el sobredimensionamiento de personal que además tiene muchas gollerías como se ha denunciado?

Tienen mucha gente desde la época de mi abuelo en la International Petroleum.Va a ser bien difícil arreglarlo, pero se tiene que hacer. Y la otra cosa tan simple es que el Perú no produce petróleo. En mi época de ministro de Energía y Minas solo lo que eran el lote uno A y B producían 220 mil barriles al día. O sea, el consumo nacional venía de un lote. Ahora es difícil que se vaya a explorar más en la selva. No está claro.

Brasil se ha desarrollado tremendamente en offshore.

Brasil está sentado sobre reservas desconocidas que van desde Guyana hasta Belém do Para en toda esa costa. Ahora Guyana tiene una producción de 1 millón de barriles al día. Y Surinam no ha empezado. Va a ser otro tanto. Claro. Y después viene el escudo brasileño sobre el Atlántico. Van en 3.5 millones de barriles y en unos años Brasil va a producer entre ocho y diez millones diarios.

Pero también se te viene el cambio de matriz energética. ¿Acaso el petróleo no tiene fecha de caducidad?

Claro. Aquí tenemos que ver bien la Hidroeléctrica del Pongo de Manseriche en Loreto, que será la última gran hidroeléctrica en América Latina. Es controversial pero daría 10 mil megavatios. Más que todo el resto de la generación del Perú. Después están los parques solares en el sur. Y el tren minero. 3s Esto de 600 camiones al día que van a Pillones desde Las Bambas, Constancia y otras, eso es una tontería. Se debe hacer un tren que va de Las Bambas a Marcona. Y al lado de Las Bambas está Haquira, que es un depósito parecido a Las Bambas. Un poquito más hacia el mar hay toda una serie de depósitos de minas de de hierro que nunca se han desarrollado porque no hay tren. Uno no puede transportar mineral de hierro en camiones. Vale poco y pesa mucho.

¿Qué hacer con el sur?

Mi proyecto favorito es ponerle gas a Juliaca y Puno. Un mini ducto desde Quillabamba siguiendo el trazo del ferrocarril, que es una curva bien poco empinada. No hay necesidad de grandes compresores, como se iba a hacer con el gasoducto, que era de 12,15 pulgadas. Nos vamos por el sur de la ciudad del Cusco, donde no hay restos arqueológicos. Y ahí seguimos al tren. Pasamos la raya, bajamos a Juliaca y ahí tenemos 750 mil personas que se mueren de frío, además de la planta de cemento de Yura, que es la más importante y abastece a Bolivia, y que se convertiría al gas. Es un proyecto manejable que podría hasta hacerse con Obras Por Impuestos y bajaría brutalmente la temperatura social en Puno. Brutalmente. He tratado de explicarlo pero no sé por qué no les interesa.