La presidenta de la República, Dina Boluarte, dio a conocer el origen del lujoso reloj Rolex que lucía. La joya no era un “artículo de antaño” que había comprado con el fruto de su trabajo como dijo inicialmente, sino que fue un préstamo del gobernador regional de Ayacucho, Wilfredo Oscorima, con quien señaló tener una amistad personal que data de la época de las protestas sociales contra su gobierno.
“Con el señor Oscorima tenemos una amistad personal. De Wilfredo a Dina y de Dina a Wilfredo. Es el primer gobernador que se paró firme cuando el Perú ardía (…) Vino acá con los alcaldes de la región Ayacucho y me dijo ‘hermana Dina, yo te voy a ayudar en esta pacificación. Ayacucho no se va a levantar’”, relató.
La mandataria aseguró que respondió durante cuatro horas a la Fiscalía de la Nación y aseguró que las joyas que luce en las actividades protocolares no son artículos de lujo, sino bisutería fina.
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En ese sentido, negó usar una pulsera Cartier de US$ 45 000, ni unos pendientes de una exclusiva marca, y que aseguró que sus joyas son de marca Unique. Negó, asimismo, tener otras joyas costosas.
Aseguró que su abogado, Mateo Castañeda, le aconsejó que primero responda los cuestionamientos de la Fiscalía y luego, dé un mensaje a la Nación en la que explique a todos los peruanos, el origen de sus joyas.
La mandataria también se dio un momento para criticar a la Fiscalía de la Nación, pidiéndole no ser mesa de partes de “alguna prensa tendenciosa” y parar con las filtraciones en los casos que investiga.
Finalmente, agradeció al Congreso por haber dado el voto de confianza al gabinete presidido por el premier, Gustavo Adrianzén y por haber rechazado dos mociones de vacancia por incapacidad moral permanente.
