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La Arquitectura y el Urbanismo son consustanciales a la calidad de vida de las personas, la defensa y protección del planeta, el rescate de la memoria, el intercambio de ideas para un uso virtuoso del territorio y aliento permanente a la búsqueda de respuestas a los desafíos de una vida organizada en las más diversas formas de asentamiento humano, con una arquitectura mensajera de sueños y aspiraciones.
En este camino hay diversos hitos culturales que van construyendo una narrativa. Uno de estos muy importante y consagrado en el mundo, es el de las convergencias denominadas Bienales que son una fiesta de las ideas, proyectos, soluciones y por supuesto nuevas e inagotables preguntas.
BIALIMA es una bienal del Colegio de Arquitectos de Lima, que llega a su tercera edición, además de una presentación internacional en Madrid. El 6, 7, 8 y 9 de octubre de este año se realizará en nuestra capital este evento.
Para el efecto, esta Bienal tiene dos ingredientes singulares: i) Una alianza con la academia muy fuerte traducida en un Comité Curatorial compuesto por los Decanos de siete de las más prestigiosas Facultades de Arquitectura y que son la Universidad Nacional de Ingeniería, San Martín, Católica, Villarreal, Ricardo Palma, UPC y la de Lima. ii) Y de otro lado la presencia por primera vez en el país de dos ciudades invitadas de Asia a donde el mundo está mirando en este momento. La ciudad china de Shenzhen que tiene 13 millones de habitantes y la ciudad-estado de Singapur con seis millones de habitantes. Ambas son unas joyas de la planificación urbana, arquitectura moderna y la calidad de vida de sus habitantes. Estarán presentes para dar testimonio de “cómo lo han hecho”; en un momento además crucial para el país; vísperas de elecciones nacionales, una de las más significativas de los últimos años, que deberían marcar un punto de inflexión.
El razonamiento capital que posiblemente se abra paso en la BIENAL es que el Perú es ya un país urbano con Lima a la cabeza, pero con ciudades fallidas, a mitad de camino y que el modelo de desarrollo del país dependerá del modelo de sus sistemas urbanos. Ningún candidato debería ignorar ese paradigma. Y que ello implica una gobernabilidad urbana democratizadora y conectada con la gente.
Los campus de algunas universidades del Comité Curatorial serán los escenarios de los cuatro días de la BIENAL, incluyendo el Centro Histórico de la capital, el corazón de la ciudad. También habrá concurso de calidad arquitectónica, concurso de espacios públicos entre municipalidades, así como presentación de trabajos académicos de antegrado, posgrado y convocatoria a proyectos visionarios. En fin, se viene una fiesta para repensar Lima y el país.