En respuesta al bloqueo de vías en el Corredor Vial Sur, en la región Cusco, la Policía Nacional del Perú (PNP) ha desplegado un total de 300 efectivos policiales para restablecer el tránsito y prevenir actos de violencia, en el marco de recientes protestas protagonizadas por mineros artesanales.
La intervención se realiza en cumplimiento del respeto al derecho constitucional de libre tránsito, buscando garantizar la seguridad de la población, así como la protección de la propiedad pública y privada. Las acciones se desarrollan bajo protocolos que priorizan el diálogo con los manifestantes.
Los efectivos policiales se encuentran distribuidos estratégicamente en los puntos de mayor tensión del corredor vial, con el fin de liberar progresivamente los tramos bloqueados y permitir el restablecimiento del comercio y el tránsito en esta importante zona del sur del país.
El Gobierno ha reiterado su llamado a los manifestantes a canalizar sus demandas por la vía del diálogo y la legalidad. Las autoridades señalaron que el objetivo principal es evitar enfrentamientos y resolver la situación sin poner en riesgo la integridad de los ciudadanos ni afectar la economía local.