Miraflores anuncia ordenanza municipal para uso de detector de armas en locales de mayor concurrencia

La norma tendrá el objetivo de prevenir que las armas no sean utilizadas en lugares públicos ni se conviertan en elementos de agresión que pongan en riesgo la integridad de las personas que asisten a centros de recreación o entretenimiento, desnaturalizando su uso exclusivo para situaciones de legítima defensa y por parte de personas con la licencia respectiva.
El burgomaestre Carlos Canales explicó que dicha medida ayudará a proteger la vida e integridad de vecinos y visitantes del distrito ante la posibilidad de que personas con problemas de salud mental o afectadas por el consumo de alcohol generen ataques con consecuencias fatales.

Ante los lamentables incidentes ocurridos en restaurantes y locales nocturnos del distrito de Miraflores, Carlos Canales Anchorena, anunció que el Concejo Municipal planteará en la próxima sesión una propuesta de ordenanza que establecerá la obligatoriedad de contar con detectores de armas de fuego en este tipo de establecimientos.

Canales Anchorena explicó que dicha norma obligará que locales como restaurantes, discotecas, bares y centros de entretenimiento en la jurisdicción cuenten con un pórtico para la detección de armas o que el personal de seguridad utilice las paletas detectoras de metales, como condición para su funcionamiento. Añadió que de no cumplirse lo establecido, se procederá a imponer multas o medidas restrictivas.

“En la próxima sesión de concejo se planteará una modificación en la ordenanza vigente para que sean obligatorios los elementos de detección de armas, en todos los locales que tengan una concurrencia masiva de personas, tal cual ocurre en diversos países del mundo”, explicó.

Asimismo, la autoridad edil remarcó que la norma tendrá el objetivo de prevenir que las armas no sean utilizadas en lugares públicos ni se conviertan en elementos de agresión que pongan en riesgo la integridad de las personas que asisten a centros de recreación o entretenimiento, desnaturalizando su uso exclusivo para situaciones de legítima defensa y por parte de personas con la licencia respectiva.

El burgomaestre sustentó esta decisión en la necesidad de proteger la vida e integridad de vecinos y visitantes del distrito ante la posibilidad de que personas con problemas de salud mental o afectadas por el consumo de alcohol generen ataques con consecuencias fatales. Además, descartó que esta medida genere perjuicios económicos a los empresarios y propietarios de establecimientos.