Este lunes 17 de marzo, padres de familia y autoridades de la institución educativa de la comunidad nativa Santa Martha, en Pucallpa, decidieron suspender las clases presenciales debido al desborde de las aguas. Tras una reunión con la dirección del plantel, acordaron aplazar el regreso a las aulas hasta que las aguas retrocedan, debido a los peligros que representa la situación para los estudiantes.
Más de 200 alumnos de la comunidad se verán afectados por esta decisión, lo que retrasa su educación. En la zona, la falta de energía eléctrica constante y la carencia de acceso a internet agravan aún más las dificultades para llevar a cabo clases virtuales o encontrar alternativas para continuar con su aprendizaje. La comunidad, además, enfrenta una situación de escasos recursos que dificulta la resolución del problema.
El día anterior, varios niños fueron transportados en botes y canoas para llegar a la escuela, mientras que otros, al no tener otra opción, tuvieron que atravesar medio metro de agua para llegar a sus clases. Esta peligrosa situación pone en evidencia los riesgos que corren los estudiantes para recibir educación en estas condiciones extremas.
La comunidad espera que las aguas disminuyan pronto para retomar las clases, mientras tanto, los padres y autoridades continúan buscando soluciones para garantizar la seguridad de los estudiantes y su acceso a la educación en medio de la emergencia.