El Ministerio de Economía y Finanzas (MEF) oficializó este 1 de octubre de 2025 la designación de Guadalupe Mercedes Pizarro Matos como Directora de la Dirección General del Tesoro Público, mediante la Resolución Ministerial N° 459-2025-EF/49, firmada por el titular de la cartera, Raúl Pérez Reyes Espejo. La resolución responde a la necesidad de cubrir un puesto que se encontraba vacante y garantizar la continuidad de la gestión financiera del Estado.
¿Qué implica la dirección del Tesoro Público?
La Dirección General del Tesoro Público es responsable de la administración y control de los recursos financieros del Estado, así como de la supervisión de la deuda pública y de las operaciones de tesorería. La designación de Pizarro Matos, por lo tanto, no solo representa un cambio en la jefatura del área, sino también un paso clave en la gestión eficiente del presupuesto nacional y la estabilidad fiscal del país.
Según la normativa vigente, la designación se ajusta a la Ley N° 31419, que garantiza la idoneidad en el acceso y ejercicio de funciones públicas de directivos de libre designación, así como a su reglamento aprobado por el Decreto Supremo N° 053-2022-PCM. También se respeta lo dispuesto en la Ley N° 29158, Ley Orgánica del Poder Ejecutivo, y la Ley N° 27594, que regula la participación del Poder Ejecutivo en nombramientos de funcionarios públicos.
Un nombramiento estratégico en tiempos de cambios
El MEF ha venido realizando una serie de ajustes y renovaciones en puestos estratégicos de la administración pública, en un contexto marcado por la necesidad de reforzar la transparencia, eficiencia y control del gasto público. La designación de Pizarro Matos llega justo cuando el gobierno busca consolidar políticas fiscales que permitan garantizar el equilibrio presupuestal y la ejecución de programas sociales prioritarios.
¿Qué expectativas genera la llegada de Guadalupe Pizarro al Tesoro Público?
Expertos señalan que la experiencia y formación de la nueva directora serán determinantes para asegurar que las operaciones de tesorería se mantengan estables, además de optimizar la gestión de recursos del Estado en un contexto de creciente demanda social y presión presupuestaria.
Perfil de Guadalupe Pizarro
Aunque la resolución ministerial no detalla la trayectoria profesional de Pizarro Matos, fuentes del MEF destacan su experiencia en gestión financiera y administración pública, además de su participación en proyectos de modernización del Estado. Su designación es vista como un movimiento estratégico para fortalecer la Dirección General del Tesoro Público y garantizar que las decisiones financieras se tomen con criterio técnico y transparencia.
El puesto que asume Pizarro es considerado clave dentro del MEF, ya que supervisa la correcta administración de los fondos estatales y asegura que los recursos lleguen a los distintos sectores, cumpliendo con los lineamientos del presupuesto público y la normativa vigente.
Procedimiento legal detrás de la designación
La designación de directores en el MEF sigue un proceso normativo detallado, que asegura la idoneidad de los funcionarios. La resolución ministerial citada establece que se cumplen los procedimientos de ley para garantizar la capacidad técnica y profesional del designado, así como su responsabilidad frente a la gestión financiera del Estado.
El artículo único de la resolución indica textualmente:
“Designar a la señora Guadalupe Mercedes Pizarro Matos en el puesto de Directora de la Dirección General del Tesoro Público del Ministerio de Economía y Finanzas. Regístrese, comuníquese y publíquese.”
Esta formalidad subraya la transparencia del proceso y el carácter oficial y vinculante del nombramiento, que entrará en vigor de manera inmediata.
Retos inmediatos de la nueva directora
Entre los principales desafíos que enfrentará Pizarro Matos están:
- Supervisar la ejecución de los presupuestos sectoriales y garantizar la disponibilidad de recursos.
- Optimizar la gestión de la deuda pública y las operaciones de tesorería.
- Coordinar con otras entidades del MEF para asegurar la eficacia de los programas sociales y financieros.
- Implementar mecanismos de control y transparencia, en línea con los estándares nacionales e internacionales.
La designación también coincide con una coyuntura en la que la eficiencia fiscal y la transparencia en el manejo de recursos se han convertido en prioridades para fortalecer la confianza de la ciudadanía en la administración pública.