La violencia volvió a sacudir al Callao la tarde del domingo 31 de agosto, cuando Carlo Alberto Medina Saravia, de 53 años, fue asesinado de cinco disparos mientras jugaba un partido de fulbito con amigos en la loza deportiva del parque La Cruz, ubicado en el distrito de Bellavista.
El ataque, perpetrado por un sujeto aún no identificado, ha generado conmoción entre los vecinos y encendió nuevamente el debate sobre la creciente inseguridad ciudadana en una de las zonas más peligrosas del país. Según información preliminar de la Policía Nacional del Perú (PNP), el homicida llegó directamente a la cancha, disparó contra la víctima a corta distancia y huyó sin ser detenido.
Un ataque directo y sin mediar palabras
De acuerdo con testigos, la víctima se encontraba disputando un encuentro amistoso de fulbito cuando un sujeto armado ingresó al parque y lo atacó directamente. Cinco disparos impactaron en el cuerpo de Medina Saravia, provocando su muerte casi instantánea.
Vecinos afirmaron que Medina Saravia era muy conocido en la zona por organizar campeonatos locales de fulbito y actividades deportivas para niños y jóvenes. Por eso, el hecho de que haya sido blanco de un ataque selectivo ha despertado suspicacias sobre un posible ajuste de cuentas o venganza personal.
“Carlo era una persona tranquila, siempre estaba organizando campeonatos. No sabemos por qué le hicieron esto”, declaró un vecino, que prefirió mantener su identidad en reserva.
Falta de vigilancia y temor vecinal
El parque La Cruz, donde ocurrió el crimen, es un conocido punto de encuentro para actividades recreativas, pero también ha sido escenario de varios episodios delictivos en los últimos meses. Los vecinos denuncian que no hay presencia policial en la zona y que la inseguridad se ha vuelto insostenible.
“Hace semanas venimos pidiendo más vigilancia. Aquí se juegan partidos todos los días, pero no hay serenazgo ni cámaras de seguridad”, comentó otra vecina indignada.
El temor entre los residentes es evidente. Muchos evitan dar declaraciones a la prensa por miedo a represalias, mientras que los familiares de la víctima decidieron guardar silencio y no ofrecieron testimonios a los medios.
Investigación en curso
Peritos de Criminalística llegaron al lugar para levantar evidencias y recoger testimonios de los asistentes al partido. El fiscal de turno dispuso el levantamiento del cadáver y su traslado a la Morgue del Callao para la necropsia de ley.
La PNP ha iniciado las investigaciones para identificar al autor material del crimen y esclarecer las circunstancias detrás del ataque. No se descarta que el homicidio esté vinculado a extorsiones, disputas personales o a la presencia de bandas criminales que operan en la zona.
El Callao, considerado desde hace años uno de los lugares con mayor índice de homicidios en el país, enfrenta actualmente una ola de crímenes relacionados con ajustes de cuentas, extorsiones y tráfico de drogas. Según cifras recientes del Ministerio del Interior, los asesinatos en la provincia constitucional se han incrementado en un 18 % durante el 2025 respecto al año anterior.
Inseguridad en el Callao: una tendencia alarmante
La muerte de Carlo Alberto Medina Saravia no es un hecho aislado. Solo en lo que va del año, se han registrado más de 120 homicidios en el Callao, muchos de ellos ejecutados con armas de fuego en espacios públicos.
Los especialistas coinciden en que la falta de estrategias integrales y la insuficiente presencia policial han facilitado que las organizaciones criminales actúen con impunidad. Además, la expansión de las bandas dedicadas a la extorsión y al microtráfico ha convertido a zonas como Bellavista en puntos críticos.
La ciudadanía, mientras tanto, clama por acciones inmediatas que permitan recuperar la seguridad y la confianza en las autoridades.
¿Estamos perdiendo el control de la seguridad en las calles?
El brutal asesinato de un hombre en plena pichanga pone en evidencia la fragilidad del sistema de seguridad ciudadana. Este hecho obliga a reflexionar sobre el nivel de exposición de los vecinos y la efectividad de las políticas actuales para combatir la delincuencia.
¿Hasta cuándo los vecinos del Callao tendrán que convivir con la violencia como parte de su día a día?