El dirigente de la empresa informal de transporte “La Rojita”, Juan Carlos Huamán Contreras, fue asesinado a tiros la madrugada del martes 15 de abril en el Asentamiento Humano 2 de Enero, San Juan de Lurigancho. Dos sujetos en motocicleta lo interceptaron al salir de su casa y le dispararon cinco veces, impactándolo en la cabeza y el tórax, causándole la muerte instantánea.
Huamán Contreras había sido víctima de amenazas extorsivas en los días previos a su muerte, lo que podría haber motivado el ataque. Testigos aseguran que, tras el tiroteo, los sicarios huyeron rápidamente en la moto, perdiéndose en las oscuras calles del distrito. La Policía Nacional del Perú (PNP) ya ha comenzado las investigaciones, enfocándose en las posibles conexiones entre este homicidio y las denuncias de extorsión que había presentado la víctima.
El crimen generó consternación en los vecinos y familiares de Huamán, quien era una figura clave en los colectivos informales de transporte que operan en la ruta que parte de la Estación San Martín del Metro de Lima. A pesar de ser trasladado de urgencia al Hospital San Juan de Lurigancho, los médicos solo pudieron certificar su deceso.
Con el asesinato de Huamán, la violencia y las amenazas dentro del mundo del transporte informal siguen siendo un tema preocupante en la ciudad. La policía ha intensificado sus esfuerzos para esclarecer este crimen y capturar a los responsables.
