Desde que Dina Boluarte asumió la presidencia en diciembre de 2022, Perú ha reportado 4,463 homicidios, según cifras de SINADEF. Solo en 2024 se registraron 2,064 asesinatos, y hasta el 10 de mayo de 2025, van 803 homicidios, lo que muestra un aumento preocupante de la violencia en el país.
Lima es la región con más homicidios, con 282 muertes violentas, seguida de La Libertad (92) y Callao (71). Aunque otras regiones como Moquegua y Pasco tienen cifras menores, el crimen organizado podría estar expandiéndose a esas zonas, lo que genera inquietud entre las autoridades.
El aumento de homicidios está relacionado principalmente con ajustes de cuentas y el crimen organizado, aunque también se vincula con el narcotráfico. Este repunte ha generado una alarma entre el gobierno, que busca implementar medidas más efectivas para frenar la violencia.
Analistas y funcionarios piden un enfoque integral para combatir la violencia, con medidas que fortalezcan la seguridad, la justicia y la prevención social. La creciente ola de homicidios exige una respuesta urgente para restaurar la seguridad en el país.